Dan de alta a la presidenta de Argentina;finalmente no tenía cáncer, dicen médicos

DPA

Buenos Aires

La presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, recibió ayer el alta médica y dejó el hospital en el que este miércoles fue sometida a una tiroidectomía. El parte médico subrayó que “se descartó la presencia de células cancerígenas” en la glándula tiroides que le fue extirpada durante la operación.
En el informe leído por el vocero del gobierno, Alfredo Scoccimarrro, el equipo médico consignó que “el estudio definitivo constató la presencia de nódulos en ambos lóbulos de la glándula tiroides de la presidenta, pero descartó la presencia de células cancerígenas, modificando el diagnóstico inicial de la punción”.
Scoccimarro indicó que “la histología definitiva fue informada como adenomas foliculares” y agregó que no fue necesaria “la administración de yodos radiactivos”, por lo que se “ha autorizado el alta médica” y la mandataria “se encuentra en óptimo estado general”.
La tiroidectomía total consistió en la extracción de la glándula tiroides. Además se le extirparon los nódulos linfáticos adyacentes. La intervención quirúrgica y posterior recuperación de la presidenta fue realizada en el hospital Austral, de la localidad bonaerense de Pilar.
A través de un comunicado, también leído por Scoccimarro, Fernández de Kirchner agradeció “a Dios y a todo el pueblo argentino por las bendiciones recibidas” durante su internación.
“La presidenta y su familia agradecen a todas las personas, ciudadanos, militantes, personalidades nacionales e internacionales por las muestras de afecto y preocupación por su salud”, expresó la carta divulgada por el vocero presidencial. Fernández de Kirchner también manifestó su “reconocimiento” al equipo médico que la atendió.
La jefa de Estado dejó el hospital en helicóptero y se trasladó a la residencia presidencial de Olivos, en la periferia de Buenos Aires, adonde continuará su recuperación.
En principio se había asegurado que Fernández de Kirchner estaría de licencia hasta el 24 de enero, pero como no tendrá que recibir el tratamiento de yodo radiactivo podría adelantar su regreso a la función pública, especuló este mediodía la agencia local DyN.