Gasta Petróleos Mexicanos 5 mil millones en reparar ductos

Petróleos Mexicanos (Pemex) gasta en promedio un millón de pesos para reparar cada una de las tomas clandestinas que efectúa el crimen organizado en sus ductos para la ordeña de combustible.

Datos disponibles de la paraestatal indican que de 2007 a junio de 2012, Pemex Refinación, Pemex Exploración y Producción, así como Gas y Petroquímica Básica, erogaron más de 5 mil 125 millones de pesos para la soldadura y reparación de los boquetes en gasoductos, oleoductos y poliductos que dejó la delincuencia tras el robo de combustible.

En este periodo, Pemex reportó un total de 4 mil 679 tomas clandestinas localizadas en su red de ductos.

En informes solicitados vía Transparencia, esos organismos establecen que los ductos más perforados por la delincuencia son Minatitlán-México, Topolobampo-Culiacán, Cadereyta-Matamoros, Salamanca-Guadalajara, Nueva Teapa-Venta de Carpio-Tula, Tula-Salamanca, Rosarito-Mexicali y Guaymas-Obregón.

Ahí se robó principalmente gasolinas y diesel, señala un reporte de Pemex Refinación, fechado en noviembre pasado.

Pemex Exploración y Producción, que transporta crudo y gas natural, dio a conocer que las afectaciones a sus ductos se focalizaron en Monterrey-Ciudad Mendo-za, Cuervito-Ciudad Mendoza, Punto de Piedra-Punto I (Tamauli-pas), Matapionche-Paso del Toro (Veracruz), Castaño-Palomas, Cárdenas-Santa Cecilia y Dos Bocas-Castaño, afirma el organismo en un documento fechado en octubre.

Para Gas y Petroquímica Básica, que transporta gas natural, gas licuado y gasolinas naturales, sus ductos más importantes, y a la vez los más afectados, son los que van de Tabasco a Coahuila, con paso en Veracruz; el de Sonora a Chihuahua, y los ductos del centro del país.

Según la estadística de tomas clandestinas de Pemex, los ductos ubicados en el Pacífico y en el Sureste son los más afectados por el crimen.

El 2012 fue el año que Pemex reportó más tomas clandestinas, con mil 449 puntos de ordeña.

Al cierre de junio de 2012, el volumen estimado de combustible sustraído ilícitamente a través de tomas clandestinas ascendió a un millón 841 mil 478 barriles, siendo 18 por ciento mayor que el faltante calculado para el mismo periodo del año pasado, que fue de un millón 557 mil 569 barriles.