Lucen llenos de basura y escombro, los cuerpos de agua de la zona Diamante

Karla Galarce Sosa

Cerros de basura y escombro rodean los cuerpos de agua que quedaron atrapados en la zona Diamante de Acapulco.
La Laguna Negra de Puerto Marqués funciona como basurero y depósito de escombro de obras de remodelación.
La avenida Revolcadero (camino de terracería que rodea  el cuerpo lagunar) tiene al margen áreas que sirven de depósito a cielo abierto y que son quemados.
Con este tiradero, se han registrado tres en menos de una semana en la zona Diamante del puerto, a donde miles de visitantes llegan para disfrutar de las playas.
En un recorrido se pudo observar que la calle que conduce al Pueblito, nombre que recibe la zona de fondas asentado cerca de la laguna Negra, comienza a servir de basurero.
Hay botellas de vidrio, residuos de obras de construcción, restos de palapas y basura casera que el viento arrastra por la calle que va hacia la playa Revolcadero, cerca de la barra de la laguna Negra.
Los vecinos dijeron que no se sabe quiénes tiran la basura, ni tampoco la hora en la que el margen del cuerpo de agua es afectado. Se pueden observar las raíces de manglares de más de cuatro metros de altura que poco a poco son alcanzadas por el cascajo vertido.
Al pasar por debajo del puente que lleva al hotel Quinta Real, se observan bolsas de basura y botellas de plástico que el agua dejó, pues en éstas fechas, la laguna posee su nivel más bajo.
El jueves el ayuntamiento informó de la detención de tres hombres con sus respectivas camionetas, quienes tiraban escombro a un terreno ubicado entre las colonias Luis Donaldo Colosio y Llano Largo, donde se pudo observar que colinda con el canal de agua que alimenta a la laguna Negra.
Las autoridades municipales y federales del sector ambiental informaron que habían comenzado procedimientos administrativos contra quien resulte responsable por el vertimiento de los desechos.
Además de ese depósito, que podría alcanzar unas 4 hectáreas de superficie, en estas páginas, se informó que en la calle Granjas del Marqués, ubicada en el corazón de la zona Diamante, servía como depósito de escombro y basura.
El ayuntamiento informó en un desplegado que ese segundo depósito clandestino, que comenzó su limpieza, por lo que mantendría cerrada esa vía durante unos días hasta dejarla limpia y fueran reabiertos ambos carriles, puesto que sólo funcionaba uno, el otro era obstruido con el escombro vertido.