No se desarrolla el campo pues Aguirre copia las políticas federales, advierten productores

Rosalba Ramírez García

Chilpancingo

El campo no ha tenido avances en los dos años de gobierno de Ángel Aguirre Rivero, debido a que se ha ceñido estrictamente y sin discusión a las políticas públicas federales, aunque éstas no resuelvan de fondo los problemas y la marginación a los que se enfrentas los productores del estado, afirmaron los representantes de dos bloques de organizaciones campesinas en el estado.
En conferencia de prensa, los representantes del Foro Permanente de Organizaciones Sociales de Guerrero y del Congreso Agrario Permanente (CAP) anunciaron que el 12 y 13 de abril se realizará en Acapulco el segundo foro Perspectiva del Sur.
Según la convocatoria, asistirán los gobernadores de Campeche, Tabasco, Veracruz, Yucatán, Quintana Roo, Puebla, Oaxaca, Morelos y Chiapas, además de Ángel Aguirre. Los trabajos del foro, según afirman sus organizadores, son para buscar el desarrollo equilibrado de todas las regiones del país.
En la conferencia de prensa, por parte del foro permanente de organizaciones estuvo su coordinador Antonio Colín Ramírez, Carlos García Jiménez y el diputado federal Sebastián de la Rosa Peláez; del CAP acudió el dirigente estatal de la Confederación Nacional Campesina (CNC), Bertín Cabañas López.
Los asistentes coincidieron en que no hay avances en el campo, pese a que ese fue uno de los compromisos de campaña de Aguirre Rivero, como consecuencia de la sumisión de los gobiernos estatales a lo que mandatan las políticas públicas del gobierno federal.
De la Rosa Peláez afirmó que en el campo todo sigue pendiente, porque el gobernador Ángel Aguirre no ha hecho nada diferente a lo que marca la línea federal en políticas públicas para el desarrollo del campo.
Afirmó que la política del gobernador Ángel Aguirre se ha caracterizado por ser repetitiva de lo que va marcando el gobierno federal.
En respuesta a la pregunta de una reportera, en el sentido de qué es lo que Aguirre Rivero ha quedado a deber en los dos años que lleva al frente del gobierno estatal, respondió que “no queda a deber nada, porque no se ha hecho nada más que lo de siempre, aunque no se soluciona ni termina con el problema”.
Afirmó que las reglas de operación de los programas federales son aceptadas por los gobiernos estatales, aunque éstos no estén de acuerdo con la realidad local y se limitan a ser ejecutores, con eso se convierten en cómplices del no desarrollo.