Rompen maestros el portón y vidrios en la sede estatal del PRD en Chilpancingo

Rosalba Ramírez García

Chilpancingo

Integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación Guerrero (CETEG), normalistas, padres de familia y organizaciones que se sumaron al contingente destrozaron ayer la fachada del edificio del Comité Ejecutivo Estatal (CEE), en protesta por el papel que ese partido ha asumido ante la reforma educativa y el movimiento magisterial.
Después de las tres de la tarde, tras una marcha por las principales avenidas de Chilpancingo y un mitin en la plaza cívica Primer Congreso de Anáhuac, en el centro de la ciudad, el contingente se dirigió nuevamente a su campamento.
Más de 4 mil personas se dirigían en marcha sobre la avenida Miguel Alemán, en la que participaron  estudiantes del Frente Unido de escuelas Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG), profesores de la CETEG, padres de familia, integrantes de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), fundadores del desaparecido Consejo Guerrerense 500 años de Resistencia y del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), pero no se pudo identificar qué grupo fue el que atacó las oficinas del PRD.
El repudio del magisterio contra el PRD se agudizó el pasado martes, cuando el Congreso local aprobó un dictamen en el que se excluyó la mayoría de las propuestas de la CETEG.
En la sesión de ese día la diputada perredista Abelina López Rodríguez advirtió al PRD que la decisión les traería consecuencias electorales, y más tarde el magisterio reprochó y manifestó su rechazo a ese partido.
A pesar de que los siete votos que el dictamen tuvo en contra fueron de diputados perredistas, el coordinador de la bancada, Bernardo Ortega Jiménez, es de los legisladores que defiende la reforma educativa federal que desató el movimiento magisterial.
La CETEG ha cuestionado el papel que los partidos de izquierda han asumido ante el movimiento magisterial, principalmente porque el gobernador Ángel Aguirre Rivero fue postulado por el PRD, PT y MC.
En el Congreso local el PRD tiene la presidencia de la Comisión de Gobierno con Bernardo Ortega Jiménez, la presidencia de la Mesa Directiva con Antonio Gaspar Beltrán (quien a nombre del Poder Legislativo ha presentado dos denuncias penales contra la CETEG), y es mayoría con 20 de los 46 diputados.
Después de las tres de la tarde, el contingente enfiló rumbo a su plantón, y cuando se aproximaban a la sede estatal del PRD, salió de allí un joven que abordó una camioneta con el logotipo del PRD y se retiró del lugar.
Al llegar a la Avenida Alemán número 80, domicilio del PRD, la única consigna de los manifestantes anunciaba un castigo en las urnas contra ese partido.
Los manifestantes en un primer momento lanzaron huevos a la fachada del edificio, mientras calificaban como “traidores”, “corruptos” y “vendidos” a los diputados perredistas.
En las pintas que realizaron en el portón y paredes del CEE se lee “PRD traidor”, “maldita cueva de rateros y traidores” en referencia al presidente de la comisión de Gobierno a quien relacionaron con el narcotráfico escribieron “Bernarco Ortega” y “malditos traidores del pueblo”.
Enardecidos, manifestaron su desprecio al PRD con golpes al portón eléctrico; otros más, con los palos que llevaban, despegaron el escudo del partido y letra por letra de lo que originalmente decía “Comité Ejecutivo Estatal”.
Mientras los manifestantes golpeaban con tubos y palos el portón y otros realizaban pintas, desde el otro lado de la calle frente al CEE, con piedras lanzadas con resorteras rompieron los vidrios de la oficinal del dirigente estatal, Carlos Reyes Torres, y de la sala de sesiones del comité.
Los golpes constantes lograron abrir el portón, y molestos los maestros arremetieron contra los vidrios de las oficinas, espejos y puertas; adentro dejaron mensajes en las paredes donde culpaban al PRD de no defender los intereses del pueblo y servir al gobierno federal y estatal alejándose de los movimientos sociales.
Con las puertas abiertas, los maestros entraron hasta el pequeño patio del CEE, desde donde con piedras quebraron un par de vidrios y el motor del portón eléctrico.
Mientras el contingente se alejaba, padres de familia, maestros y simpatizantes del movimiento magisterial insistían a gritos que castigarían al PRD en las elecciones de 2015.