Se reubicó a educadoras de El Coloso que fueron amenazadas y nadie quiere sustituirlas: SEG

Karla Galarce Sosa

La secretaria de Educación, Silvia Romero Suárez, informó que cuatro de las seis educadoras del jardín de niños Frida Kahlo, en la unidad habitacional El Coloso, fueron reubicadas luego que recibieron amenazas por el crimen organizado.
Entrevistada al concluir el arranque de la Semana Nacional de Vacunación en la primaria Gregorio Torres Quintero, Romero Suárez admitió que no se cuenta con  recursos humanos para cubrir los cambios, además que no hay educadoras que quieran laborar en esa zona.
“Las maestras del jardín de niños Frida Kahlo, seis de ellas solicitaron cambio por intimidaciones que han sufrido, ya se propuso y se logró el cambio de cuatro de ellas y sin embargo, faltan dos y estamos viendo la posibilidad de reponer esos recursos”, dijo la funcionaria.
A pregunta sobre si la SEG cuenta con la cantidad necesaria de educadoras, para cubrir los espacios que dejen las maestras que se vayan de ese centro escolar, Silvia Romero dijo que “ese es el problema, no tenemos recursos suficientes para poder hacer estos cambios y necesitamos ver las permutas”.
Celebró el reinicio de clases en las zonas escolares 44 de nivel preescolar y 207 de nivel primaria en la zona suburbana de Acapulco.
“Nos da mucho gusto participar a la comunidad acapulqueña y decir que el conflicto que prevalecía en El Coloso, que provocó que las escuelas primarias, jardines de niños y algunas secundarias pararan labores; como una manifestación del apoyo que se requería, fueron escuchados”, expuso.
Dijo que la seguridad fue reforzada desde el viernes, y las clases se desarrollaron normalmente y “el jardín de niños Frida Kahlo que presentó problemas muy serios de seguridad contra algunas maestras, finalmente ha hecho eco de estos llamados”.
Dijo que para las seis educadoras que fueron amenazadas, la SEG buscó los cambios de algunas, pero indicó: “es casi imposible mover a personal docente en el área de Acapulco, que está un tanto complicado por los cambios que se dieron”, pero “finalmente cuatro de ellas ya fueron removidas, ya fueron cambiadas y eso ha provocado que las maestras tengan confianza en que las autoridades están escuchando”.
Romero explicó que por el cambio que ellas piden, de zona dentro del puerto, “donde ya están completas las plantillas” se requiere de gente que las sustituya.