Toman cetegistas la delegación de los Servicios Educativos Acapulco-Coyuca

Aurora Harrison

Unos 30 profesores de la Coordinadora Estatal de los Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), tomaron las oficinas de la Delegación de los Servicios Educativos de la Región Acapulco-Coyuca de Benítez, a pesar de la “represión administrativa” de las autoridades que amagan con retirarles sus plazas y retenerles su salario.
Consultado por reporteros de los diferentes medios, Néstor Miranda Vinalay, integrante del comité regional de la CETEG en Acapulco,  justificó que el “terror administrativo” ha hecho que en cada centro de trabajo lleven a cabo sus propias estrategias de participación, y eso ha ocasionado que el paro de labores en las escuelas de la región sea parcial con participaciones escalonadas de los maestros.
“Nosotros decimos que esta toma de la delegación tiene que ser activa, estamos previendo un perifoneo, un volanteo para que la gente se dé cuenta de lo que estamos pidiendo, y en qué consiste la reforma educativa; a lo mejor una marcha, marcha con antorchas en la noche y actividades diferentes que tenemos que estar implementando” dijo.
Aseguró que pese al temor que les ocasiona la represión y endurecimiento del gobierno, seguirán las acciones porque “sabemos que estamos defendiendo nuestro derecho y la educación pública, porque vamos a ser afectados si esto se aplica como el gobierno quiere”, dijo.
Explicó que tomaron las oficinas como parte de los acuerdos de la asamblea estatal del movimiento magisterial y que será de manera indefinida hasta que tomen en cuenta su iniciativa de reforma.
Negó que en Acapulco se esté bajando la guardia, se están reorganizando, dijo, además “se anuncia el paro indefinido nacional, a pesar de la represión, el endurecimiento de las autoridades, sí hay temor pero defendemos nuestro derecho y la educación pública”, reiteró.
Agregó que algunos maestros están en sus escuelas en proceso de reorganización, porque el miércoles se realizó una marcha multitudinaria y los maestros van a tener contacto con sus estudiantes porque “no queremos desatenderlos, porque son parte fundamental”.
Miranda Vinalay sostuvo que las “autoridades siguen amedrentando a los compañeros con rescindirles el contrato laboral, y nos pegan en donde nos duele, en la retención de salario, algunas escuelas deciden su participación, pero no se ausentan en su totalidad”.
Negó que los paros parciales en Acapulco vayan en contra de los acuerdos estatales, pues dijo “que es parte de la autonomía de las regiones y los mecanismos en cada región, pero en Acapulco estamos movilizados 5 mil maestros de manera escalonada”.
Sobre las declaraciones del Secretario de Educación Pública Emilio Chuayffet de retirarle las plazas a quienes no se presenten en las escuelas, respondió “es parte de la persecución administrativa, el terror, y sabemos de los riesgos que corremos y sabremos implementar algunas medidas o en las pláticas de la mesa negociadora preverlas para que no sucedan”.
Por su parte la comisionada de gestoría social, Patricia Meza Rendón aseguró que estos paros parciales se deben a que están en fase de reorganización; e indicó que un 30 por ciento de los centros de educación básica están en paro.
“Más o menos serían 360 escuelas en Acapulco que tienen cerradas sus puertas, aunque no tenemos contabilizado cuantos maestros ni alumnos afectados”, respondió la docente, quién declaró a reporteros al interior de la delegación de los Servicios Educativos.
Explicó que la ausencia en las aulas es de manera parcial, porque están en la segunda etapa del Movimiento Popular Guerrerense, que no tenía unas cifras exactas porque la situación geográfica de Acapulco es diferente en otras regiones del estado de Guerrero.
Los maestros están movilizados desde el 25 de febrero. El 6 de marzo, antes del periodo vacacional de Semana Santa, tomaron la Delegación de los Servicios Educativos pero la liberaron días antes que iniciaran las vacaciones porque el gobierno los convocó a una mesa de diálogo, que después se rompió.