Pide el PRD a partidos “no sacarle la vuelta al problema” magisterial

Rosalba Ramírez García

Chilpancingo

El Comité Ejecutivo Estatal (CEE) del PRD se reunió anoche para analizar el Movimiento Popular de Guerrero, creado a partir del movimiento magisterial en contra de la reforma educativa, pero no se pronunciará a favor ni en contra y sólo llamó al diálogo.
Después de las siete de la noche, el dirigente estatal Carlos Reyes Torres y el secretario general, Evodio Velázquez Aguirre, se reunieron con los secretarios del CEE, entre los que estuvieron Moisés Acevedo Rodríguez, Leonor Ortiz Valle, Virginia Trejo Trujillo, Perfecto Rosas Martínez, Mario Ruiz Valencia, Yolanda Domínguez Flores, Luis Cortés Guevara y Marco Organis Ramírez, en un restaurante en la salida norte de Chilpancingo.
La sesión se realizó después de los llamados públicos de varios integrantes del comité y dirigentes de corrientes, quienes reprocharan a Reyes Torres el silencio de la dirigencia estatal sobre el movimiento magisterial.
Los perredistas reclamaban un posicionamiento del PRD en torno al movimiento magisterial, que a pedradas y palos el sábado pasado manifestó su repudio al partido en el gobierno estatal y es mayoría en el Poder Legislativo.
Sin embargo, en la reunión de ayer el acuerdo al que se llegó fue publicar un “pronunciamiento” en torno a la manifestación que el Movimiento Popular de Guerrero realizó el miércoles y el bloqueo de ayer en la Autopista del Sol, que la Policía Federal estuvo a punto de desalojar.
El “pronunciamiento” festeja la “tolerancia” por parte del gobierno de Ángel Aguirre y la prudencia de los manifestantes, dijo el dirigente estatal, Carlos Reyes.
Se le preguntó si un partido de izquierda debe agradecer que las manifestaciones no sean reprimidas, y respondió que aunque no es deber de los gobiernos reprimir, sí hay quienes lo hacen, por eso festejó que en esta ocasión no sucediera.
También reconoció a la fracción del PRD en el Congreso local por “atender al llamado de la CETEG”, a pesar de que el coordinador de los diputados perredistas, Bernardo Ortega Jiménez, fuera presionado en público por el legislador Nicanor Adame Serrano para convocar a sus compañeros e iniciar la mesa de trabajo con el Movimiento Popular de Guerrero.
“Si fue Nicanor quien ayudó a que la reunión se diera, entonces lo felicito a él”, dijo el dirigente perredista.
Reyes Torres llamó a los diputados de los demás partidos a no “sacarle la vuelta al problema” e involucrarse en el tema de las demandas magisteriales.
Se le preguntó por qué después de casi dos meses de iniciado el movimiento de los maestros y tras cinco días de la agresión a la sede perredista, el CEE apenas se estaba reuniendo y sólo para acordar la publicación de un pronunciamiento, y si era sólo temor electoral el que los orilla a salir a habar del tema, pero afirmó que no los mueven temores político electorales, “eso sería mezquino”.
Insistió en que el reclamo no fue contra el partido sino contra la reforma educativa federal, y recordó que desde que el dirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano Grijalva, firmó el Pacto por México, él se pronunció en contra, pero esta vez dijo que no se manifestará en contra de la reforma educativa.
Se justificó y dijo que respeta la organización y autonomía de la CETEG y ahora del Movimiento Popular de Guerrero.
A la pregunta respondió que no conoce en su totalidad la reforma educativa, “no soy un experto”.
Por otra parte, dijo que de manera oficial en el CEE nadie ha pedido que se convoque a sesión del Consejo Estatal, y mucho menos a un comité ampliado para hablar del movimiento popular, y que él tampoco lo propondrá, porque “los que más pueden hacer son los diputados locales y federales”.