Encarcelan a indígenas que auxiliaron a un baleado por la municipal de Xochistlahuaca, denuncian

Misael Damián

Ndyowe (Ometepec)

Tres indígenas, dos hombres y una mujer, que fueron encarcelados durante nueve días por policías municipales, de la comunidad Renacimiento del Municipio de Suljaa’ (Xochistlahuaca), denunciaron que les fabricaron el delito de agresiones en contra de los agentes porque trasladaron a un hombre baleado a un hospital.
“Yo acudí porque la señora María Agustina, quien es mi vecina, me pidió que llevara a su esposo al hospital porque estaba herido”, afirmó el chofer Marcos Gómez Paula quien auxilió al herido, Mario Morales. Después se supo que fueron los municipales los que le dispararon.
Gómez Paula salió de la cárcel el viernes, alrededor de la seis de la tarde. Dijo que para no ir solo al hospital pidió que lo acompañara Talislao Santiago Rosas, su vecino, “donde inicia la carretera para Guadalupe Victoria nos detuvieron los policías municipales ahí bajaron a Talislao y me dejaron llevar al herido”. La mujer encarcelada es la esposa del hombre baleado por la municipal.
Talislao Santiago afirmó que una vez que lo bajaron del carro Tsuru particular en que se trasladabam los policías le dijeron que estaba cometiendo un delito al acompañar al herido, y que cuando éste contestó que sólo trataba de ayudar, “un policía me cacheteó”.
Dijo que después de la cachetada, los policías lo obligaron a subir a la camioneta en que se trasladaban mientras detrás iba el Tsuru.
En la clínica, que se encuentra en Cozoyoapan a unos metros de Xochistlahuaca, luego de internar al herido los policías subieron a la camioneta a la esposa del herido y al chofer, y al otro día interpusieron una denuncia por lesiones, “lo que es totalmente falso, nos fabricaron el delito”, reiteró Talislao Santiago.
El jueves 11 alrededor de la una de la mañana, policías municipales irrumpieron a balazos en una vivienda en la comunidad de Renacimiento que sólo se separa por una calle de la de Guadalupe Victoria.
Los uniformados querían detener al joven de 20 años, Zacarías Morales Agustina, a quien le dispararon en ambas piernas y ahora se encuentra grave en un hospital en la ciudad de Acapulco. Según la información de los familiares, el padre de Zacarías, Mario Morales Concepción acudió en auxilio de su hijo y fue recibido de un balazo en la pierna derecha.
Por eso, la esposa de Mario, María Agustina Ángela enojada, de que habían baleado a su hijo y a su esposo, con un palo golpeó en una pierna a un policía.
Vecinos de la comunidad dijeron que todo empezó porque los policías querían detener a Zacarías Morales, quien estaba escuchando música en una de las equinas de las calles del lugar, pero que al ver esto corrió a su domicilio a donde fue perseguido por los preventivos, y que al forcejear logró quitarle el arma a uno de ellos, lo que los molestó y lo balearon en ambas piernas.
El viernes fueron liberados los indígenas y ya libres denunciaron los hechos y advirtieron que seguramente sufrirán represalias de las autoridades municipales y de la corporación policiaca.
Pero consideró que es necesario que su comunidad y el pueblo amuzgo sepa la verdad de los hechos, porque un periódico local publicó que los indígenas “emboscaron” a los policías.
Entrevistados en el zócalo de esta ciudad, acompañados de su traductora, Marcela de Jesús Natalia, dijeron que es necesario dar la información correcta a la población de Guadalupe Victoria y de Renacimiento, porque saben que el lunes el síndico municipal, José Felipe López Néstor realizó una reunión en la comunidad de Renacimiento y se deslindó de la situación, dijo que la Policía Municipal de Xochistlahuaca no tuvo nada que ver con la detención de los indígenas, que fueron los efectivos del Ejército quienes detuvieron a los amuzgos de Renacimiento.
“Por eso haremos una reunión para desmentir eso y así decirles a nuestros paisanos que fueron los policías de Xochistlahuaca los que nos detuvieron y entregaron a las autoridades de Ometepec”, dijo molesto Talislao Santiago.
Relató que el día en que los detuvieron eran cerca de las tres de la mañana cuando los entregaron a la Policía Investigadora Ministerial, quienes a su vez los entregaron a la Policía Preventiva Municipal de Ometepec y les tomaron fotografías.
Luego fueron trasladados, el sábado a la una de la tarde, a los separos donde los acusaron de agredir a policías municipales y después fueron encerrados en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de esta ciudad.
Los tres indígenas fueron liberados el viernes en la tarde, María Agustina fue la principal acusada por lesiones, pues el traductor dijo a las autoridades que ella le dio a un preventivo con un machete, cuando fue con un palo pero el traductor tergiversó la declaración para favorecer a los policías, porque con ellos no fue nadie que pudiera hablar amuzgo. Sin embargo, como hubo varios testigos la liberaron pero tuvo que pagar treinta mil pesos de fianza.
Al chofer y a su acompañante los absolvieron sin pago de fianza, mientras que Mario Morales se encuentra todavía en el hospital general de Ometepec y su hijo Zacarías Morales está en un hospital de Acapulco, donde su estado de salur se reporta como grave.
Hace unos días, el presidente municipal de Xochistlahuaca, Celerino Rojas Morales afirmó en una conferencia en Chilpancingo que los policías fueron atacados, pero que todo había vuelto a la “tranquilidad”, sin embargo los afectados señalan que seguirán con sus denuncias ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (Codehum), porque no es justo lo que les pasó.