Apoyaría el Ayuntamiento con espacios a la SEG para reiniciar clases si lo solicita: Moreno Arcos

Anarsis Pacheco Pólito

Chilpancingo

Después de que la secretaria de Educación en Guerrero, Silvia Romero Suárez, informara sobre la sustitución de maestros jubilados y la solicitud del apoyo a las autoridades locales, el alcalde de Chilpancingo Mario Moreno Arcos aseguró que cuenta con los espacios para que se reinicien las clases.
En entrevista vía telefónica, el edil explicó que está listo para apoyar a la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) con espacios públicos, para que se impartan clases a los niños que no han asistido a las aulas donde hay maestros paristas.
Explicó que aún no se cuenta con maestros jubilados que podrían dar las clases en dichos espacios, y recordó que no ha tenido ninguna plática con algún trabajador de la SEG o incluso con la secretaria.
Dijo que si la SEG pide el apoyo del gobierno local lo darán y si lo requirieran esperarán a que se les entreguen los requerimientos que las instituciones educativas establezcan para que estén operando en el tiempo que se solicite.
“Si nos pidieran la participación con gusto damos el espacio y si hay necesidad de contratar maestros también”, comentó.
Respectó a los hechos del miércoles, donde resultaron dañados los edificios políticos del PRI, PRD, PAN y Movimiento Ciudadano, dijo que no pueden pasar desapercibidos, aunque él no es la autoridad competente.
Calificó a los actos como vandálicos pues ponen en riesgo la integridad física de los ciudadanos capitalinos y por ello deben ser castigados.
Dijo que mientras en la capital se desarrollaban los hechos en las diferentes cedes de los partidos, el edil se encontraba en las oficinas de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) pero fue informado sobre las acciones emprendidas por parte del Movimiento Popular Guerrerense.
Mencionó que ofreció colocar agentes de seguridad en las oficinas donde se suscitaron los hechos, y que habló con los dirigentes del PAN, PRI y Movimiento Ciudadano para brindar el apoyo.
Moreno Arcos dijo que el Ayuntamiento preveé posibles roces con los activistas y recordó que no hubo mayores problemas en sus instalaciones, y que no se pusieron en riesgo a los trabajadores y las oficinas.