Atender molestias por las reformas educativa y laboral para evitar conflictos, pide el arzobispo

Mariana Labastida

El arzobispo Carlos Garfias Merlos insistió en que los integrantes del Movimiento Popular Guerrerense retomen el diálogo, y que se debe de aplicar la justicia por los daños ocasionados en la marcha del Día del Trabajo en Chilpancingo.
En conferencia de prensa, Garfias Merlos se refirió a las inconformidades por la reforma laboral y educativa que están relacionadas con las condiciones de trabajo, y pidió que se atiendan para que no se conviertan en conflictos y desacuerdos.
“Contar con un trabajo digno se ha convertido en un verdadero privilegio” pues no existe seguridad y justicia y el desempleo se incrementa, indicó.
Dijo que en las colonias populares del puerto se percibe una situación de riesgo, “donde se dan muertos, hay cuestiones de delincuencia y se tiene que hacer una labor más fuerte para la construcción de la paz”.
Agregó que en la Costa Chica la dinámica es diferente porque los sacerdotes tienen que acercarse y dialogar con los policías comunitarios y ciudadanos para apoyarse en ellos y que no se multipliquen las expresiones de violencia, sin que sea un respaldo para no seguir trabajando porque “no podemos renunciar” al trabajo pastoral.
En el comunicado semanal, el arzobispo pidió a las autoridades que pongan atención porque es preocupante que los jóvenes no tengan un lugar para desarrollar sus capacidades, sobre todo en las condiciones actuales.
Sobre las manifestaciones de los integrantes de la CETEG y organizaciones sociales del Movimiento Popular Guerrerense, que el miércoles pintaron oficinas públicas y dañaron vehículos durante su marcha por Chilpancingo, el arzobispo pidió a los docentes que retomen el diálogo y que no se continúe generando molestia e inconformidad en la sociedad.
En cuanto a los daños ocasionados, Garfias Merlos manifestó que los protestantes que están evidenciados tendrán que asumir la responsabilidad por afectar a terceros, “tiene que haber justicia” y deben ser juzgados pues “la impunidad no nos va ayudar a encontrar el camino de justicia y de la paz”.
Garfias Merlos dijo que “preocupa que en lugar de que se vean expresiones para encontrar caminos de solución pareciera que se polarizan las posiciones y se agudiza el conflicto”, por ello cualquier persona o institución, como la Iglesia, que pueda colaborar estarán dispuestos a hacerlo para solucionar el conflicto.
Sobre la advertencia de la Secretaría de Educación Guerrero de aplicar descuentos a los profesores que no acuden a laborar, Garfias Merlos dijo que además de manifestarse deben de responder y ser responsables con sus obligaciones, “tienen la responsabilidad de asistir a las aulas y atender a los alumnos” y agregó que es primordial atender la educación de los niños y los jóvenes.