A un día de que inicien las lluvias no saben de los refugios, dicen vecinos de Paseo de la Cañada

Mariana Labastida

A un día de que inicie de manera oficial la temporada de lluvias, los vecinos de la colonia Paseo de la Cañada, ubicada en zona de alto riesgo, no han sido notificados por Protección Civil sobre la ubicación de albergues. Las viviendas de dicha zona han cambiado de casas de lámina y cartón a concreto.
Los vecinos de la cañada, que se encuentra entre los edificios de la unidad habitacional Infonavit alta Progreso, han adecuado el área para llegar a sus viviendas que están de tres a 10 metros del pequeño cauce que corre por allí.
Cleotilde Rentería Bravo lleva 25 años viviendo en Paseo de la Cañada y su casa es un conjunto de llantas apiladas que retienen la tierra del cerro para que no se deslave. Arriba se ve un pequeño cuarto de madera, lámina y cartón donde viven ella, su esposo y cinco niños.
Recuerda que el año pasado no fueron los trabajadores de Protección Civil a visitarlos y tampoco lo han hecho este año; “nos vienen a dar recomendaciones, que si hay deslaves que nos salgamos y que busquemos el refugio, pero está lejos y no tenemos por dónde subir”.
La casa de Cleotilde es una de las miles que están construidas en zona de alto riesgo y a un lado hay un andador improvisado con costalillas que sirven de escalones. Del otro lado una vivienda igual a la suya, de lámina y madera, está resguardada con una malla metálica y en la base de ambas casas junto al cauce hay varios árboles de plátanos.
A dos casas estaba la vivienda de Ángela Barrera Tapia, a quien durante años los de Protección Civil le dijeron que tenía que salirse por estar en zona de riesgo, a lo que hizo caso y se cambió del otro lado del cauce, en una ladera, a unos 10 metros de alto de donde pasa el río; ahí su hijo le construyó una casa de paredes de concreto y techo de lámina.
Con Ángela viven otros tres adultos y cuatro niños que llegan a la vivienda por un camino improvisado de tierra que han hecho rellenando el cauce y el otro es por el río subiendo por costalillas llenas de tierra.
“A ver cómo nos van en las aguas”, dijo la hija de Ángela y es que apenas está el proyecto para edificar el muro de contención que impida que en la casa haya deslaves.
En la colonia Paseo de la Cañada en los últimos años las viviendas han cambiado de ser de lámina y madera a concreto, los vecinos han construido andadores y escaleras, y confían en que las lluvias no provoquen deslaves debido a que con el paso del huracán Paulina, aunque arrastró muchas de las plantas, no causó daños en las casas.
Los vecinos recuerdan que trabajadores de Protección Civil ha ido a visitarlos, que les colocan anuncios y les ayudan a ubicar el refugio temporal más cercano, pero que en este año nadie ha acudido a un día del inicio oficial de la temporada de lluvias, el 15 de mayo.