Admite el líder del SNTE que sólo conoce superficialmente el pacto que se firmó

Lourdes Chávez

Chilpancingo

Aunque firmó el Pacto Social por la Educación con el gobierno del estado, el secretario general de la sección 14 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Emiliano Díaz Román, reconoció que sólo lo conoce superficialmente y que en un primer momento no estaba dispuesto a suscribirlo, por puntos “que no veíamos convenientes”.
En una entrevista radiofónica en la capital del estado, el dirigente sindical también precisó que el SNTE sólo tiene de 230 a 240 comisionados sindicales, y que tal vez la secretaria de Educación, Silvia Romero Suárez, quien estimó 2 mil, “se quedó corta”, porque afirmó que existen comisionados en cada uno de los subsistemas y jefaturas de sector en todos los niveles educativos, con funciones administrativas y de técnicos en pedagogía.
Y cuestionó al gobierno estatal: “¿Cuántos nuevos ingresos trajeron ellos con claves? Hablan de un déficit presupuestal y si revisamos sería muy complicado saber cuántos nuevos ingresos hay en esta administración, en el sector educativo, además con precisión; también trajeron a las delegaciones docentes comisionados con funciones administrativas”, dijo.
Asimismo, dijo que ha pedido a las autoridades hablar con cuidado y con sus comentarios, porque si le dan un enfoque equivocado, confunden a la población que luego tacha a los maestros de flojos y piensan que por su culpa, “el estado está en crisis y es mentira”.
En la entrevista, Díaz Román reveló que un día previo a la firma del pacto social, el 28 de febrero, se reunieron en una comisión de trabajo de la Secretaría de Educación, y con mucho jaloneo llegaron a algunos acuerdos, entre estos destacó que el estado se  compromete a “implementar exámenes de oposición para seleccionar a funcionarios de todos los niveles de mando de la SEG”.
Explicó que generalmente se impone a personal que no sabe a lo que llega, y es necesario que en puestos claves se coloque a personas de las que se pueda aprender, o al menos que tenga conocimientos similares a los demás, “para poder construir”.
Sobre el pacto social firmado en un gran acto protocolario, aseguró que sólo lo conocía “la cúpula” y no se puede llamar así a un documento que sólo “enjuicia al maestro”, que detalla sus responsabilidades, pero no las de las autoridades, del gobierno y el sindicato.
Consideró que el documento “tiene un poco de forma, pero le falta mucho fondo”, y en tanto los actores fundamentales “no asumamos compromisos y responsabilidad, no se va a cumplir nada”, sentenció.
Dejó claro que el SNTE sí participa en el pacto, pero cuestionó que no se discutió con los sectores educativo, empresarial y con la sociedad civil, porque “yo tengo autonomía, no soy apéndice del gobierno del estado”.
Díaz Román dejó claro que no ha firmado ningún documento que afecte los derechos de los trabajadores, y hasta el último día de su gestión –que termina este año– se respetará la propuesta de sucesión del maestro que quiera jubilarse, “pero no nada más abiertas, tenemos que ir cubriendo los perfiles para no afectar tanto al sector educativo”, reconoció.
Consideró “magnífica” la propuesta que el gobernador Ángel Aguirre presentó en el acto del 28 de febrero, sobre el retiro voluntario, pero aclaró al mandatario que con el retiro voluntario las plazas no se congelan, sino que desaparecen, por lo tanto no se puede hacer uso de ellas.
En cambio recomendó, para evitar la herencia de las plazas, ofrecer al docente un bono al retiro de 100 mil o 150 pesos, para que la SEG haga uso de la plaza. Consideró que es lo que más conviene, porque la plaza que se congela un año permitiría economías por 100 o 50 mil pesos.
Sobre los trabajadores de la educación comisionados, Díaz Román se dijo dispuesto a publicar su lista con nombres y funciones, sin embargo afirmó que existen otras relaciones adjudicadas al SNTE que pertenecen a la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), y al Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG).
También aseguró que el pago de 90 días de aguinaldo, no es motivo del déficit financiero de la SEG, como señalan las autoridades educativas, porque 75 días los paga la federación y 15 el gobierno del estado, pero en tanto los ciudadanos piensan que es por culpa de los maestros que el gobierno “está en quiebra”.
Después de la entrevista, sin polemizar, la secretaria de Educación declaró que en la instrumentación de nuevas acciones para mejorar la calidad de la educación en Guerrero, caben todas las aportaciones, sugerencias y criterios de los diferentes actores, y se requiere de la suma de voluntades, esfuerzos, de todos aquellos “que tenemos responsabilidades ante la sociedad”.
Subrayó que la realidad de Guerrero preocupa a las autoridades y en este sentido se ocuparon en el diseño de una ruta, pero van a escuchar todas las voces, y reiteró que la firma del pacto es sólo el inicio de los trabajos, “no podemos cambiar esquemas que se han venido practicando desde décadas”, y aseguró que transparentar el quehacer de la función pública en el tema educativo también es una instrucción del gobernador.