Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Recuerdan en un libro la represión que se vivió en Atoyac en la década de los 70

Francisco Magaña

 

Atoyac

 

Como parte de la conmemoración del Día Internacional del Detenido-Desaparecido se presentó en Atoyac el libro Desaparición Forzada. Terrorismo de Estado en México, que expone la situación de represión que se vivió en el municipio por parte del gobierno.

Asimismo se hizo un recorrido por el ex cuartel militar por parte de los familiares para renombrar los espacios que hoy son parte de las oficinas municipales de la presidencia de Atoyac. También se efectuó un evento sociocultural, breve debido a la lluvia que comenzó a caer.

La presentación fue hecha en el auditorio del Ayuntamiento por la académica Judit Solís Téllez, el cronista municipal Víctor Cardona, el director de la Casa de la Cultura, Rubén Ríos y el académico Wilivaldo Rojas Arellano.

Al final de la exposición se hizo entrega de reconocimientos a los familiares de los desaparecidos.

Desaparición Forzada fue un trabajo de cinco años realizado por Claudia Rangel Lozano, Evangelina Sánchez Serrano y Francisco Ávila Coronel, que documenta testimonios de familiares que reseñan la represión que se vivió en los años setentas por parte del Ejército mexicano que desplegó más de 24 mil efectivos militares para contrarrestar la insurgencia que encabezó Lucio Cabañas Barrientos.

Asimismo exponen la exigencia de justicia por parte de los comités independientes de familiares que originó la conformación en Guerrero de la Afadem, organización que es la primera en llevar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos el caso del campesino Rosendo Radilla Pacheco, a quien se reconoce como un desaparecido por el Ejército mexicano por el que se emitió un fallo al gobierno de México.

Rubén Ríos aseveró que el libro rescata la memoria que se ha buscado tapar por el gobierno de lo que se vivió en Guerrero, donde la situación de tranquilidad fue quebranto por muchos años por el gobierno mexicano, donde no se respetaron los derechos humanos de la ciudadanía.

Judith Solís destacó que se aborda el caso de Rosendo Radilla, el cual a pesar de ser de los más documentados, no fue investigado por los tribunales en México, donde se buscó minimízalo, lo que motivó a la familia a buscar que se aplicara la justicia en la Corte Internacional de Derechos Humanos.

Abundó que en el caso de las excavaciones que se están realizando en el ex cuartel militar por la PGR, es una “faramalla” del gobierno federal.

Cuestionó que los expedientes del Archivo General de la Nación, como se expone en el libro, fueron manipulados por un ex agente de la extinta Dirección Federal de Seguridad; que se han saqueado archivos que luego han sido hallados en mercados de pulgas, al menos en el caso de fotografías.

“Con ellos queda claro que se busca borrar las evidencias de la verdad histórica, porque está en manos del Cinsen (Centro de Investigación y Seguridad Nacional)”.

Cardona Galindo citó que el llamado desarrollo social que el gobierno comenzó a aplicar en los pueblos, como la construcción de carreteras y canchas de basquetbol fueron estrategias utilizadas por el Ejército para contrarrestar la guerrilla.

Comparó que el lugar donde hoy se presentaba el libro fue un centro de represión y tortura, “fue un cuartel militar donde en este mismo cuartel se dictaban las órdenes”.

El profesor Wilivaldo Rojas Arellano reseñó que él fue testigo de la represión que se vivió en los pueblos sobrevolados por helicópteros y los patios asoleaderos de café eran usados para aterrizaje de las naves.

Recordó que además las familias tenían que darle de manera obligada de tres a cinco soldados alimentos.

Lo que se vivió, dijo, “fue un terrorismo de estado porque se atacó a la sociedad civil, hay muchas personas inocentes que no tenían nada que ver con la guerrilla y están desaparecidas, porque nunca las presentaron ante un juez para su defensa”.

Agregó que “antes llevar el apellido Cabañas era un delito, lo que se busca hoy es la justicia, el Estado mexicano pretende que los familiares de los desaparecidos olviden esa historia negra, todos los responsables se han cubierto por el manto de la impunidad y no han sido castigados; ya dos gobiernos han estado al frente del gobierno, el PRI con su dictadura y el PAN que dejó pasar una oportunidad de justicia; en el caso de los gobiernos de izquierdas hay desencanto con los dos últimos gobiernos de la entidad que se caracterizan por soberbios y represivos”, concluyo.

468 ad