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Incendian la casa de un indígena y lo atacan a machetazos para quitarle su tierra en Cochoapa el Grande, denuncia

Zacarías Cervantes

 

Chilpancingo

 

El cacique de Joya Real, municipio de Cochoapa el Grande, Felipe Julián Valdez quemó la casa del indígena mixteco, Emiliano Julián Agustín y luego lo atacó a machetazos para robarle un terreno de 3 hectáreas. La denuncia no prosperó debido a que el comisario municipal y el síndico actuaron a favor del agresor.

El indígena, quien no habla nada el español, auxiliado por el intérprete, Antonio Victoriano Hernández denunció que el 28 de febrero, Julián Valdez fue a quemarle su casa en la que vivía con tres de sus hijos menores de edad y su esposa, después lo atacó a machetazos y le hirió la muñeca de la mano derecha.

Dijo que el motivo es que su agresor, quien ha sido comisario, mayordomo y comandante de la comunidad, quiere quedarse con 3 hectáreas de tierra como se ha quedado con las de otros habitantes de Joya Real y actualmente es dueño de la mayor parte de las mejores tierras de la comunidad.

“El señor es un ambicioso cacique que se está quedando con las tierras de otros habitantes”, denunció ayer en esta capital el agredido a través de su intérprete.

Mencionó que recientemente fue despojado de sus tierras el indígena Felipe Rodríguez Julián, un adulto mayor, quien recientemente falleció, al parecer como consecuencia de la injusticia que sufrió, pues le falsificaron su firma y posteriormente fue echado de su casa y murió en la casa de uno de sus familiares.

Emiliano Julián dijo que presentó la demanda penal en contra del cacique Felipe Julián, sin embargo denunció que no prosperó debido a que el comisario municipal Antonino Modesto y el síndico Bernardo García, intervinieron a favor del cacique.

Informó que desde el 28 de febrero que le quemaron su casa ha vivido alternadamente en las casas de sus familiares, con sus tres hijos y su mujer. También ha tenido que vivir de la caridad del pueblo porque con su casa se quemó su maíz y todas sus pertenencias.

Antonio Victoriano Hernández, traductor y sobrino de Emiliano Julián, denunció que días después de la agresión que sufrió, acudieron con el secretario de Asuntos Indígenas, Filemón Navarro Aguilar para que le ayudara cuando menos con la atención médica para curarse de la muñeca que estuvo a punto de desprenderle de un machetazo Felipe Julián, pero que el funcionario le dijo que la dependencia no tenía presupuesto para esas cosas.

Agregó que la situación de Emiliano Julián sigue siendo grave, puesto que al quemarse su casa se quedó en la calle y que ahora no puede trabajar para mantener a su familia, mientras que ninguno de los funcionarios a los que han acudido han querido ayudarle. Además el indígena es sordo y no habla ni entiende el español por lo que no puede encontrar empleo.

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