Regresó ayer la dirigencia del PRD a sus oficinas restauradas

La dirigencia estatal del PRD regresó ayer a sus oficinas en la avenida Miguel Alemán número 80, después de que hace más de un mes militantes del Movimiento Popular Guerrerense (MPG) arremetieran contra el inmueble como manifestación de repudio.

El sábado 6 de abril, el contingente de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación Guerrero (CETEG) causó destrozos en las oficinas partidistas después de que el Congreso local rechazara sus propuestas de reforma a la ley estatal de educación con el voto de la mayoría de los dipurtados perredistas.

En esa ocasión los daños fueron de más de 400 mil pesos, y el viernes 25 de abril regresarían a trabajar ahí y sólo quedaba pendiente cambiar el portón eléctrico.

Pero el martes 23 del mismo mes el pleno del Congreso local votó nuevamente contra el proyecto de la CETEG, con el voto de varios diputados de ese partido, que se había comprometido a respaldarlo.

La respuesta del magisterio y el MPG fue arremeter contra las oficinas partidistas en una manifestación, empezando por las del PAN; después se dirigieron a las de Movimiento Ciudadano y como tercer punto a las oficinas perredistas, donde además de destrozar puertas, muebles y vidrios incendiaron por lo menos siete oficinas y la bodega, para después y por último, arremeter contra la sede priista.

Más de una semana el Comité Ejecutivo Estatal (CEE) sesionó y se reunió en restaurantes, pero después rentó tres salones de reuniones en el Rancho los Cedros.

Ayer los integrantes del CEE regresaron a sus oficinas en Miguel Alemán 80, después de que la empresa contratada para restaurar los daños les entregara el primer piso.

En la planta baja los trabajos continúan, entre pintura, cambio de losetas, instalación eléctrica y las nuevas puertas.

La empresa cobrará un millón 170 mil pesos, que a decir del dirigente Carlos Reyes pagarán únicamente con dinero del PRD. Pero necesitarán por lo menos dos millones de pesos más para comprar el equipo de cómputo destruido, los teléfonos y muebles y fotocopiadora (que está en una esquina como desecho), confirmó la secretaria de finanzas, Virginia Trejo Trujillo.

La oficina del dirigente estatal Carlos Reyes Torres está prácticamente intacta, con la misma sala, centró de mesa y escritorio, e incluso una fotografía con Cuauhtémoc Cárdenas. (Rosalba Ramírez García / Chilpancingo).