Refundar las normales y distribuir mejor el presupuesto, plantean en un foro del SNTE

Aurora Harrison

En el foro Las leyes secundarias de la reforma educativa que organizó la sección 14 del Sindicato Nacional de Trabajadores de Educación (SNTE), los especialistas Manuel Ibarra Santos, de Zacatecas; Elena Bailón Cortés, de Guerrero, y Silvia Luna Rodríguez, del comité nacional, coincidieron que la evaluación a maestros no debe ser estandarizada, ni punitiva y que deben respetarse los derechos de los trabajadores.

Durante el panel en el auditorio de la Universidad Americana, asistió como invitada la titular de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), Silvia Romero Suárez; el diputado local Emiliano Díaz Román; el secretario general de la sección 14 del SNTE, José Hilario Ruiz Estrada; y los maestros opinaron que debe haber más presupuesto y la palabra permanencia después de la evaluación no tiene que ponerse en duda, para que los maestros se esfuercen en elevar la calidad educativa y no en defender sus derechos sindicales.

Además Manuel Ibarra Santos y Silvia Luna plantearon que deben transformarse las más de 400 normales públicas en el país, y que el gobierno federal haga una mejor distribución de los recursos en las entidades, para que haya desarrollo, escuelas con buenas instalaciones y con las tecnologías que se requieren para elevar la calidad educativa.

El investigador zacatecano Ibarra Santos consideró que si los maestros, padres y la sociedad deben participan en esta etapa fundamental de las leyes secundarias, y se trabajar en el instituto de evaluación, el servicio profesional docente y evaluar a las autoridades del sector educativo para que “respondan a las expectativas del estado”.

“Los maestros deben ser sometidos a evaluaciones racionales, y no estandarizadas, pero no se debe olvidar otro factor importante de la medición, que es el ámbito educativo, que se refleja en el aprendizaje del alumno pero también evaluar a la autoridad educativa, que se mida su desempeño público, de los servidores del gobierno”, argumentó.

Abundó que para perfeccionar su desarrollo, México debe preguntarse el perfil del maestro y es que se viven momentos complicados, porque más de 30 millones de mexicanos se encuentran en condiciones de rezago educativo, de esos siete millones son jóvenes que deben ir a bachillerato, pero no lo hacen porque son invisibles para las políticas públicas.

Sostuvo que el SNTE está demostrando que se compromete con la calidad de educación, sin embargo sostuvo que las más de 400 normales públicas deben de reivindicarse, de tal manera que los jóvenes egresados traigan ese compromiso de elevar la calidad.

Por su parte, Elena Bailón opinó que la palabra permanencia que está en la ley debe estar ligada a la formación continua, para enaltecer el trabajo docente, además de que el instituto de evaluación debe ser un organismo autónomo, que no haya autoridades de la Secretaría o del sindicato, sino académicos reconocidos por su prestigio.

“El gran reto que tenemos como sindicato y como sección 14 es que ningún maestro pierda su empleo en la medida, que participe en todo el proceso de su desarrollo profesional, nosotros como sindicatos tutelamos los derechos de los maestros”, consideró.

Sostuvo que la propuesta es que en las leyes secundarias debe de estar de forma contundente la gratuidad, la obligatoriedad, laicidad y calidad educativa y quede de manifiesto el respeto y el mecanismo para estimular en su función a los maestros de México, y que la evaluación sea una herramienta para la reforma pero que no sea “punitiva o para satanizar, estigmatizar a los maestros, sino al contrario identificar las áreas de oportunidades”.

Por su parte, la integrante del comité nacional del SNTE, Silvia Luna, dijo que el sindicato lo que propone es “la defensa de la educación pública y los derechos de los trabajadores de la educación, principios que no se excluyen”, y que defenderán lo que está plasmado en el artículo 3 de la Constitución para que sean una realidad para los niños.

Agregó que los maestros de ninguna manera tienen que renunciar, como lo ha expresado el dirigente nacional del SNTE, Juan Díaz de la Torre, a sus derechos sindicales y por eso dijo que el pronunciamiento del sindicato es a favor de la reforma que busque elevar la calidad de la educación pública y que tenga una igualdad de presupuesto en las escuelas.

“Que se dote de idoneidad a las escuelas, cuáles serán las atribuciones que en la ley general se le otorguen o reserven a los tres órdenes de gobierno, cuáles a los legisladores, no habrá reforma educativa si las políticas públicas no van acompañada de presupuesto porque nada surge de la nada, no puede haber calidad sino hay condiciones para que suceda”, dijo.

Explicó que en México todavía hay escuelas que están bajo un árbol, que son de madera y no se requiere de buscar culpables o responsables sino sumar esfuerzos a la nación, para que se revalore la profesión docente y “no queremos evaluación estandarizada”.

Sostuvo que para que exista calidad educativa, la permanencia no debe estar sujeta a una evaluación, por el contrario debe haber certeza para que los maestros apliquen sus esfuerzos en mejorar y no en defender los derechos y conquistas sindicales, además que precisó que las autoridades deberían destinarle el ocho por ciento del Producto Interno Bruto.

Los analistas, quienes fueron moderados por Ernesto Salgado Cortés, coincidieron en que la evaluación que se aplicará a los maestros debe ser integral, respetar los derechos laborales, y haber una igualdad en la distribución del presupuesto para que se pueda elevar la calidad educativa y disminuir el rezago educativo que existe en algunos estados.