Es todo un fracaso el programa Guerreros por la Educación, denuncian trabajadores

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

Trabajadores del programa Guerreros por la Alfabetización, mediante el cual la actual administración estatal se proponía alfabetizar a 50 mil guerrerenses sólo el año pasado, denunciaron que ha sido todo un “fracaso” y que a raíz de la destitución hace tres semanas del coordinador general, Sergio Tavira Román, el nuevo coordinador, Ricardo Castillo Barrientos, ha comenzado a despedir al personal.
Además, se quejaron del retraso constante en el pago de sus salarios, pues apenas el sábado pasado los 200 trabajadores de la coordinación de la zona Centro cobraron las dos quincenas de febrero, luego de que el viernes mandaron un oficio al gobernador Ángel Aguirre Rivero, con copia al secretario de Finanzas y Administración, Jorge Salgado Leyva, exigiéndoles el pago.
“El nuevo coordinador, Ricardo Castillo, ni siquiera da la cara, quien a su vez cumple la función de asesor personal del gobernador. Ese señor llega a trabajar a las 11 de la noche a las oficinas cuando ya no hay nadie, seguramente en el día no se presenta porque está con el gobernador”, denunció un empleado.
Mientras tanto dijo que en lo que lleva funcionando el programa, han cambiado a cuatro contadores.  “Y yo no sé si el último contador no es eficiente o no sabe gestionar el dinero, el cuento es que hasta para situaciones elementales como el salario de los trabajadores no hay dinero”, dijo uno de los trabajadores inconformes, quien no autorizó la publicación de su nombre por el riesgo a perder su empleo.
“Por lo pronto ya nos informaron ayer en la noche (el sábado), que ya ni siquiera podemos ir a firmar, y al parecer es lo mismo que está ocurriendo en las coordinaciones de la región de Tierra Caliente, Costa Grande y Costa Chica”, dijo.
Informó que a raíz de la salida del coordinador general, Sergio Tavira, hace tres semanas, 15 trabajadores han sido despedidos sólo en la coordinación de la zona Centro por parte del nuevo coordinador Ricardo Castillo. “No sabemos lo que está pasando en las otras coordinaciones, pero sí sabemos que Ricardo Castillo trae compromisos personales fuertes desde cuando andaba en campaña con el gobernador”, denunció el trabajador.
En un documento, los trabajadores del programa revelaron que el motivo por el que el gobernador Ángel Aguirre destituyó a Sergio Tavira Román como coordinador, fue porque informó a los medios de comunicación que el programa tiene adeudos con diversos proveedores por 5 millones 173 mil pesos.
También mencionan que la destitución obedeció a un “complot” entre la secretaria de Educación, Silvia Romero Suárez, y el propio gobernador Aguirre Rivero.
En el documento los trabajadores informan que los adeudos son de más de 198 mil pesos de ocho inmuebles que se rentan en igual número de regiones; 229 mil pesos a proveedores; 160 mil pesos de gastos operativos de las coordinaciones regionales; 40 mil pesos al coordinador estatal; 100 mil pesos al coordinador del método Yo sí puedo, Bulmaro Muñiz Olmedo; y otros 20 mil pesos al coordinador operativo del programa, el cetegista Félix Moreno Peralta.
También se adeudan 100 mil pesos para la operación del programa en la coordinación estatal, 105 mil pesos a las comisiones del método cubano, y del Conafe, por concepto de supervisión del programa; 118 mil de pesos a alfabetizadores y técnicos en el municipio de Huitzuco; más de 34 mil pesos a siete comisionados que supervisan la aplicación de la Palabra Generadora, entre otros casos.
Asimismo, los trabajadores denunciaron que como resultado del desorden y anarquía que priva en ese programa, desde mediados de febrero “se extraviaron” dos camionetas y un automóvil Tsuru que utilizan los funcionarios del organismo y que los vehículos todavía no han sido recuperados, “no sabemos si fueron robados o qué fue lo que pasó, el cuento es que no aparecen”, dijo uno.
El programa Guerreros por la Alfabetización fue puesto en marcha formalmente por el gobernador Aguirre Rivero el 8 de septiembre del año pasado, cuando anunció que la meta inicial sería la alfabetización de 50 mil guerrerenses al finalizar diciembre, meta que, según los trabajadores, no se cumplió porque en algunos casos ni siquiera se alcanzó a integrar los grupos.
El programa se realiza con diversos métodos, uno de ellos es el cubano Yo sí puedo y para su operación aquí el gobierno estatal firmó un convenio de colaboración con representantes del gobierno de Cuba, por lo que académicos de este país se encuentran en esta entidad aplicando este programa, sin embargo tampoco se ha informado de los resultados.