Encabeza la regidora Sofía Mendoza marcha en Chilpancingo por el caso Hernández Cardona

Lourdes Chávez

Chilpancingo

La regidora de Iguala y pareja de Arturo Hernández Cardona, Sofía Mendoza Martínez, encabezó ayer una marcha del Movimiento Popular Guerrerense (MPG) en Chilpancingo, para demandar el esclarecimiento del asesinato de los tres dirigentes de Unidad Popular, ocurrido hace dos semanas, y castigo a los responsables intelectuales y materiales del crimen.

En la protesta, Mendoza Martínez aclaró que no abandonó Iguala y que no dejará el cargo, ni va a desistir de la demanda de justicia, luego de que trascendió que había salido de la ciudad por amenazas.

Reiteró el llamado para que el caso sea atraído por la Procuraduría General de la República (PGR).

La marcha, donde participaron unos 700 integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG), del Frente Único Estatal de Representantes de Sindicatos Autónomos (FUERSA), del Frente de Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG) y de la UP, se realizó en medio de una lluvia intermitente entre las 11 y las 12 del día, y concluyó con un mitin en la explanada de la plaza Primer Congreso de Anáhuac, a la 1 de la tarde.

En la plaza, las obras de levantamiento del piso de la explanada con maquinaria pesada se detuvieron mientras se desarrolló el mitin político, donde los manifestantes denunciaron hostigamiento a las organizaciones sociales en el estado y en el país.

El dirigente de la CETEG, Minervino Morán Hernández, recordó el homicidio del  diputado y presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso local, Armando Chavarría Barrera; el asesinato de dos estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa; el de los tres dirigentes de la UP, entre ellos Hernández Cardona, así como la muerte de ocho maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en un accidente en una caseta de una autopista de Michocán, el jueves pasado.

De lo que ocurrió en Michoacán, donde se informó que una pipa se quedó sin frenos y mató a ocho maestros de la CNTE que protestaban en una caseta de cuota, Morán Hernández declaró que es bastante dudoso que haya sido un accidente, pues “la represión está tomando una gran variedad de formas, luego de los asesinatos de compañeros de Iguala, cómo aparecen, los asesinaron, hay una sistemática represión al movimiento social y en el país”.

El dirigente informó que en el marco del paro cívico nacional en contra de las reformas estructurales que convocaron ayer organizaciones en el país, marcharon como MPG para exigir principalmente el esclarecimiento de los asesinatos de los dirigentes de la UP, castigo a los responsables y la indemnización a víctimas y familiares.

Por separado, Mendoza Martínez denunció que a la fecha no saben qué ocurrió en el asesinato de los dirigentes que fueron levantados y posteriormente ejecutados hace alrededor de dos semanas; pero el caso tampoco ha sido atraído por la PGR, ni ha recibido alguna llamada del gobierno del estado ni de la Procuraduría de Justicia del Estado para que nos informe de los avances.

Antes las versiones de que dejó Iguala por amenazas, aseguró que tiene residencia en el municipio y continúa en funciones como regidora, a pesar de que no la han convocado a reuniones de gobierno ni de cabildo, así como a otros dos representantes populares del PRI y del Verde Ecologista de México, lo cual es anticonstitucional, denunció.

Añadió que se manejan dos versiones de su posible salida del ayuntamiento, por renuncia y porque van a pedir su desafuero por la marcha en Iguala y los destrozos que manifestantes ocasionaron en el ayuntamiento para exigir la presentación con vida de sus compañeros, cuyos daños se han estimado en dos millones de pesos.

Sin embargo, cuestionó, cuánto cuesta la vida de sus compañeros para las autoridades; “no me hubiera importado el desafuero, si los hubieran presentado vivos”.

La regidora insistió en que hay responsabilidad del alcalde José Luis Abarca Velázquez en los homicidios, por negligente, así como de los integrantes del cabildo que no cuestionaron sus acciones, y que a todo respondían “sí presidente”.

Sobre los sobrevivientes del rapto, indicó que sólo se ha establecido comunicación con ellos para saber que están bien, pero no han hablado sobre la agresión, porque es un tema más delicado y aún no están en condiciones emocionales para presentarse ante las autoridades.

Reiteró el llamado al gobierno estatal a que cese la represión contra los integrantes del movimiento, y que en su momento la PGR ofrezca garantías para que los testigos puedan hacer su declaración.

Adelantó que la organización se va a reagrupar para emprender acciones en los próximos días.