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La policía ciudadana, alternativa válida frente a la inseguridad, asegura el arzobispo Garfias Merlos

Daniel Velázquez

 

El arzobispo de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, opinó que la incursión de la Policía Ciudadana de la UPOEG en Xaltianguis es una alternativa para atender el problema de la inseguridad.

“Sigue siendo una alternativa válida en el apoyo para la seguridad y en el apoyo a las autoridades que tienen la responsabilidad de proveer seguridad a la sociedad”, dijo.

Manifestó que las policías ciudadanas son esfuerzos “válidos” y responden de manera emergente a las necesidades de seguridad.

Dijo que con el tiempo y la experiencia será mejor darles un marco jurídico, “pero no en este tiempo, habrá que tenérselos que dar porque están resultando alternativas a las experiencias de más violencia e inseguridad”.

De la postura de rechazo a la Policía Ciudadana que mantiene la alcaldesa de Tierra Colorada, Elizabeth Gutiérrez Paz, quien acusa a los policías ciudadanos de ampararse en esa agrupación para cometer delitos, el arzobispo dijo que la Policía Ciudadana tiene “validez”.

Agregó que si hay vinculación y coordinación con la autoridad competente “no es que tenga que ser en todos los municipios ni que en todos los casos tenga que estar de la forma adecuada, pero sí es una alternativa válida en el caso de Xaltianguis si se está dando con estas características, puede tener una expresión válida como participación ciudadana, yo creo que en cada caso; si la alcaldesa, que es la autoridad, puede ser que ahí por lo pronto no sea la mejor alternativa la policía ciudadana”.

De la advertencia que hizo el dirigente de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio, que serán reaprehendidos los primeros vecinos de Ayutla, Tecoanapa y San Marcos que fueron detenidos cuando se integraron como grupos de autodefensa porque la Procuraduría de Justicia del estado los dejó libres, el arzobispo dijo que esos son procesos jurídicos que deben partir de pruebas y evidencias para demostrar que son delincuentes y proceder conforme a la ley.

“Yo lo veo como una buena alternativa de participación ciudadana si se dan las condiciones” para que no haya abusos hacia la sociedad, señaló el arzobispo de Acapulco.

Sobre el mando policial único que firmaron los alcaldes de la zona norte, Garfias Merlos dijo que es parte de las alternativas que buscan las autoridades para enfrentar la violencia y responder a la inseguridad.

“Pienso que es un esfuerzo que están haciendo para responder a la situación que están viviendo”, dijo.

En su mensaje semanal, el arzobispo abogó por la solución pacífica de los conflictos en el estado, como las diferencias que hay entre la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) y la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), y el rechazo a la intención de explotar yacimientos mineros en la Montaña y a la construcción de la presa hidroeléctrica La Parota.

“Estos conflictos deben ser atendidos de manera inmediata y eficaz por las autoridades competentes para buscar soluciones pacíficas, con apego al derecho y con pleno respeto a los derechos humanos, de manera que puedan prevenirse y evitar respuestas violentas que se sumen al crítico clima de violencia que ya tenemos”, expresó.

Planteó como una necesidad que los conflictos sean oportunidades de generar la paz y para ello es necesario la buena voluntad de las autoridades civiles “para construir caminos”.

Deseó que “se dé puntual seguimiento a cada conflicto que está esperando una solución definitiva” en el estado.

Garfias Merlos también informó que el próximo miércoles la comunidad diocesana de Acapulco acudirá en peregrinación a la Basílica de Guadalupe, y que participarán sacerdotes y fieles laicos.

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