Juzgará la CRAC a quienes intenten dividir a los pueblos, advierte al grupo disidente

Zacarías Cervantes / Chilpancingo

La Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) reprobó “enérgicamente”, los intentos de dividir al territorio comunitario de un grupo opositor a la institución indígena, y advirtió que se realizarán las investigaciones correspondientes para deslindar responsabilidades, y que los responsables “serán juzgados en sus propios pueblos”.

La CRAC contestó así, mediante un comunicado, a los comisarios, comisariados y expulsados que encabezan un grupo disidente que el domingo se reunió en Santa Cruz del Rincón, municipio de Malinaltepec, y acordó la instalación de una Casa de Justicia paralela en San Luis Acatlán, además de que nombraron a coordinadores y comandantes.

La institución indígena informó ayer que los intentos por dividir a la CRAC, “se siguen llevando a cabo por personas que en algunos casos, ostentando el cargo de comisariados y comisarios han utilizado la mentira, el engaño, la difamación y la intimidación como método para presionar a otras autoridades comunitarias y en otros casos han caído en graves abusos de autoridad usurpando funciones que no les corresponden”.

Reprochó a quienes son autoridades comunitarias y participan en el grupo disidente que los pueblos les  otorgaron las responsabilidades y los cargos “únicamente para beneficio de los pueblos, más no para que lo usen para caprichos o fines personales, ni mucho menos en contra de los legítimos intereses, entre los que están la unidad y armonía de pueblos originarios”.

También adelantó que con fundamento en los sistemas normativos del sistema comunitario, la CRAC-PC desconocerá todas resoluciones que hayan sido adoptadas (por el grupo opositor) sin el consentimiento expreso de los pueblos “y que por lo tanto no hayan sido avaladas por la mayoría de los habitantes de sus pueblos en asambleas generales, mediante actas levantadas con anterioridad a dichas resoluciones”.

El grupo al que se refirió la CRAC es el que encabeza Cirino Plácido Valerio y Apolonio Cruz Rosas, quienes recientemente fueron expulsados y han estado convocando reuniones en comunidades que son territorio de la CRAC para desconocer a los actuales coordinadores.

“La CRAC-PC responsabiliza a estas personas de sembrar la discordia y el encono en territorio comunitario, entre los cuales se señala a Bruno y Cirino Placido Valerio, Apolonio Cruz Rosas, además de Jacob Nava, a quien al parecer se le busca designar con algún cargo, cuando siendo vecino de la cabecera municipal de San Luis Acatlán, no pertenece a ninguna localidad específica del sistema comunitario”, cuestionó la CRAC en su escrito.

También acusó que la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (Upoeg) “ha estado fraguando una alianza con el presidente municipal de San Luis Acatlán, Alejandro Contreras, así como con conocidas familias de delincuentes como es el caso de Fidel Lozano y del comisariado ejidal Darío Manzo, con el despreciable objetivo de dividir y destruir a la CRAC-PC y a todo el proyecto comunitario para hacer posible la intromisión de las mineras a nuestro territorio”.

Por ello la agrupación sentenció que “la división al interior de los pueblos es atentar contra los pueblos mismos”.

Y agregó que “unos cuantos líderes disidentes, quienes dicen conocer los fundamentos del sistema comunitario, no han sido capaces de comprender que con sus acciones destruyen un tejido social que debiera fortalecerse a través del diálogo franco y limpio que abone la unión y la solidaridad entre los pueblos, y no de debilitarlo con acciones insidiosas y conspiraciones”.

Finalmente, la CRAC hace responsables “a estas personas, y a los grupos de poder involucrados en estas acciones, de cualquier enfrentamiento que pudiera suscitarse, así como de las consecuencias que esto pudiera traer entre los pueblos hermanos y entre miembros de la Policía Comunitaria”.