Serán castigados en China hasta con pena de muerte los delitos ambientales

Daniel Méndez / Agencia Reforma

Beijing / China

Los delitos ambientales serán castigados en China hasta con pena de muerte.

El pasado miércoles entró en vigor una nueva interpretación judicial que aplicará condenas más severas para los que contaminen el medio ambiente.

“En los casos más graves, se podría aplicar la pena de muerte”, explicó la agencia oficial Xinhua.

La medida fue hecha pública por el Tribunal Popular Supremo y la Fiscalía Popular Suprema de China.

Ésta pretende facilitar el trabajo de los jueces y movilizar a las fuerzas del orden para perseguir con mayor eficacia los delitos medioambientales.

“Con un criterio más preciso de las condenas y las sentencias, la explicación judicial proporciona una poderosa arma legal para aplicar la ley”, afirmó Xinhua citando documentos oficiales.

En China ya existen leyes que penalizan duramente los delitos medioambientales, pero muchas veces no se aplican por corrupción o por los beneficios económicos que generan ciertas industrias.

La legislación aumenta la cooperación entre la policía y las agencias de protección medioambiental e incrementa los controles sobre el vertido de materiales tóxicos y la contaminación de los ríos.

Las autoridades, sin embargo, no han especificado los casos en los que se aplicaría la pena capital.

Según Amnistía Internacional, China ejecuta a más presos que el resto de países del mundo juntos, sobre todo por delitos económicos y tráfico de drogas.

La Fundación Dui Hui, con sede en San Francisco, estima que en el año 2011 unas 4 mil personas fueron condenadas a muerte en el gigante asiático.

Con la nueva ley, Beijing busca responder a la creciente sensibilidad social que se ha generado en el país en torno a los problemas medioambientales.

Éstos han sido provocados en buena medida por el rápido desarrollo económico de China, su dependencia del carbón y la ineficacia energética.

Según Yang Chaofei, vicepresidente de la Sociedad China de Ciencias Sociales, las manifestaciones e incidentes por problemas ambientales en el país crecieron 120 por ciento entre 2010 y 2011.

En la mayoría de los casos, el gobierno tuvo que dar marcha atrás en sus planes y cancelar o aplazar proyectos industriales que ya había aprobado.

El pasado 14 de junio, el Consejo de Estado aprobó 10 medidas para reducir la contaminación.

El nuevo gobierno chino quiere rebajar el crecimiento de las industrias más contaminantes, aumentar las multas y elevar los estándares de protección medioambiental.

El objetivo es reducir la polución en un 30 por ciento por unidad del PIB para 2017.