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Acuden visitadores de la CNDH a Xaltianguis a escuchar a víctimas de la violencia

Mariana Labastida

 

 

Trabajadores de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) visitaron la comunidad de Xaltianguis, donde escucharon a víctimas de la violencia que denunciaron ejecuciones, desapariciones, cobro de cuotas y secuestros.

El coordinador de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Gonzalo Torres Valencia, dijo que por lo menos 70 personas denunciaron algún delito y que la intención es que la CNDH haga una recomendación o alguna forma de resarcir el daño a las víctimas.

El segundo visitador general, Marat Paredes Montiel, acompañado de cinco abogados, un médico y un psicólogo se reunieron con pobladores en la cancha de básquetbol, donde escucharon a las víctimas que fueron convocadas por la Policía Ciudadana que resguarda Xaltianguis desde el pasado 12 de junio.

Torres Valencia explicó que el personal de la CNDH visitaba la comunidad a petición de ellos para que tuvieran un acercamiento con la población, “ya que nos habían juzgado de una manera diferente, siempre ellos han estado defendiendo los derechos de los delincuentes y nosotros le hicimos ver que también desde este lado tenemos derechos humanos y los familiares de las víctimas tienen derechos”.

Agregó que se busca que conozcan el sentir de las víctimas y que con las denuncias que hagan se “dé una forma, una manera de recompensar de alguna parte o hacer una recomendación al gobierno, no sé los mecanismos que utilicen pero si es necesario reclamar su derecho”; e indicó que por lo menos 70 pobladores se acercaron al personal a exponer algún caso.

Una de las víctimas de la violencia explicó que se decidió a dar a conocer su caso por sus hijas, para que se haga algo por ellas porque les atropellaron sus derechos humanos al dejarlas sin padre y que no lo había hecho por miedo, además de que consideraba que la queja no le devolvería a su esposo.

La mujer recordó que hace tres años su esposo fue uno de los cinco ejecutados por hombres armados en la cancha del pueblo donde se jugaba la final de un torneo de futbol, que ahí llegaron buscando a un hombre tirando balazos y otro les respondió a los que iban a bordo de un vehículo que a su vez comenzaron a disparar contra todos los que veían el partido.

“Algunos alcanzaron a correr,  me cuentan personas que mi esposo ayudó a muchos y él ya no pudo, corrió y le dispararon por la espalda y le dieron el tiro de gracia”, recuerda la mujer, quien también indicó que del hecho no se hizo ninguna investigación.

Pobladores señalaron que no se atrevían a denunciar por miedo, pero que la Policía Ciudadana les dio confianza, y es que antes de la llegada de los integrantes del Sistema de Seguridad Ciudadana dijo estaban obligados a vivir en el miedo ante el abandono de las autoridades.

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