Blatter elogia la Confederaciones pese a las protestas: “no es nuestro problema”

DPA

Río de Janeiro

El presidente de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA), Joseph Blatter, calificó hoy de gran éxito la Copa Confederaciones, que termina el domingo en Brasil.

“Desde el punto de vista organizativo y futbolístico, estoy realmente feliz”, señaló Blatter en una rueda de prensa en Río de Janeiro. La competición fue “intensa y atractiva”, agregó.

“El test ha sido un éxito. Hubo muchos goles, que es lo que le gusta a la gente”, dijo el presidente de la FIFA.

A pesar de las masivas protestas populares en varias ciudades de Brasil, Blatter aseguró que nunca pensó en cancelar el torneo.

“El próximo Mundial va a ser un éxito, también en lo que se refiere a seguridad”, prometió Blatter con vistas a Brasil 2014. Sin embargo, aseguró que el torneo de dentro de un año es “otra dimensión”.        Sobre el descontento social por los gastos, Blatter afirmó entenderlo y recalcó que el objetivo de la FIFA “no es sacar provecho del país, sino ayudarlo en todo lo necesario para que el Mundial sea un éxito”.

El dirigente cree que las protestas que congregaron a millones de personas en todo el país son un “problema político” que excede el ámbito de la FIFA: “No es nuestro problema”.

El suizo recordó a los manifestantes que como anfitrión Brasil aceptó responsabilidades que van más allá de sus propios intereses. “Cuando un país es elegido para organizar un Mundial, no es un Mundial para el país, sino que es un Mundial para todos”.

El ministro brasileño de Deportes, Aldo Rebelo, señaló que los manifestantes hicieron coincidir sus protestas con los partidos para ganar notoriedad, pero no “para evitar su celebración”.

Rebelo recordó que todo comenzó por un aumento del precio del autobús en Sao Paulo, ciudad que no fue sede de la Confederaciones, pero que acogerá el partido inaugural del Mundial 2014. El ministro afirmó que las protestas habrían tenido lugar igual sin la Copa.

Blatter recalcó su “confianza” en el gobierno brasileño y en la población de un país “que ama el fútbol”.

España y Brasil se enfrentarán el domingo en el estadio Maracaná de Río de Janeiro en la final de la Copa Confederaciones.