Paga Mexhidro 775 mil pesos anuales por la concesión en la presa El Gallo: Conagua

*El permiso se puede revocar si se demuestra técnicamente que la empresa está causando daños ambientales o hay incumplimiento de alguno de los requerimientos, dice el delegado de la dependencia federal en el estado, José Humberto Gastélum Espinoza

Anarsis Pacheco Pólito

Chilpancingo

El delegado de la Comisión Nacional de Agua (Conagua) en el estado, José Humberto Gastélum Espinoza confirmó que la empresa Mexhidro paga anualmente 775 mil pesos que estipula la ley y por ello tiene una concesión legal que permite la explotación de agua de la presa El Gallo.
La hidroeléctrica Mexhidro que opera en la presa del Gallo en Cutzamala, paga solamente 775 mil pesos anuales por la utilización de los recursos naturales con los que produce la energía que le deja ganancias de más de un millón de pesos diarios.
El pago de 775 mil pesos anuales es lo que estipula la ley y por ello la empresa tiene una concesión legal que le permite utilizar el agua para generar la energía, acotó que “a nosotros no nos interesa si gana uno o dos millones diarios, lo que revisamos es que tenga su concesión en regla y esté al corriente de sus pagos que se marcan en la ley de aguas nacionales”.
El funcionario federal refirió que además el conflicto que se ha generado entre la empresa y Cutzamala se refiere a un convenio que signaron de manera particular y al que no invitaron a la Conagua ni siquiera para atestiguarlo.
Sobre los señalamientos del alcalde de Cutzamala, Isidro Durarte Cabrera, de las presuntas alianzas de Conagua con Mexhidro, el delegado desmintió tal hecho y señaló que están siendo parciales ante el conflicto.
La Conagua ayudará a buscar una solución al conflicto, ante las continuas reuniones del municipio y la empresa que se ha dedicado a generar energía en el lugar.
“Pero es un tema en que no intervenimos directamente porque no somos parte directa”, agregó.
Gastélum Espinoza refirió que si el municipio decide parar a Mexhidro, será a esa empresa y no a la Conagua que es la operadora de la presa que inicialmente se construyó con fines agropecuarios para garantizar agua en las zonas de riego pero se encontró otra utilidad con la producción de energía.
Confirmó que así como se otorgó la concesión a la empresa Mexhidro para la operación de la hidroeléctrica, ese permiso le podría revocar si se demuestra que está causando daños ecológicos o incumple con alguno de los requerimientos para ser concesionarios, sin embargo los daños ecológicos se tienen que demostrar con estudios técnicos y no sólo con dichos de los habitantes, por ello intervendrá la UNAM para realizar los estudios.
“Por ello el gobernador se comprometió a pagar estudios de impacto ambiental que realizará la Universidad nacional Autónoma de México (UNAM) y si hay afectaciones las pagará quien las haya ejecutado, y si hay afectaciones podría haber una revocación de la concesión”, señaló.
Comentó que si el municipio exige que Mexhidro se vaya, la Conagua tratará de revocar la concesión pero ello tendría que hacerse con evidencias claras de las afectaciones.
Sobre señalamientos de que por la operación de Mexhidro se ha bajado el nivel del agua en esta presa indicó que eso no es posible pues la Conagua es quien opera y regula la presa en base a dos planteamientos, primero, que se tiene que regular el nivel para que se garantice que haya agua para el riego, y, segundo, que no se ponga en riesgo a quienes habitan las partes bajas.
Finalmente, reconoció que en esta presa se han causado afectaciones a los productores de pescado dado que los animales que pasan por las turbinas mueren o salen mal, sin embargo todos esos detalles se arrojarán en el dictamen técnico que realizará la UNAM.