Mata la autodefensa de Ayutla a dos sicarios que atacaron a los desplazados de La Laguna

*Los sorprenden detrás de un cerro cuando estaban por irrumpir a las casas con cuernos de chivo. Detienen a uno más que está bajo resguardo de la Policía Ciudadana. Uno de los caídos es guarura del alcalde, dicen vecinos. Al menos dos son del municipio de Petatlán

Zacarías Cervantes

La Unión / Ayutla

Un grupo de cuatro hombres armados pretendió atacar ayer a las familias desplazadas de la Laguna, municipio de Coyuca de Catalán que se encuentran refugiadas en La Palma II, anexo de la comunidad de La Unión, municipio de Ayutla, sin embargo fueron descubiertos y en un enfrentamiento, dos de los agresores murieron y uno más fue detenido.
El ataque fue repelido por los hombres de las familias desplazadas y policías del Sistema de Seguridad Ciudadano (SSC), que reaccionaron de inmediato para dar protección a las familias.
Vecinos de las comunidades cercanas reconocieron a uno de los abatidos como trabajador o “guarura” del presidente municipal de Ayutla, Severo Castro Godines, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), sin embargo, la identidad de los dos hombres muertos y del detenido no fue proporcionada por el Ministerio Público que acudió a realizar las diligencias, ni por los integrantes de la policía ciudadana que asumieron el control del caso.
Los testimonios recogidos entre los vecinos dicen que eran aproximadamente las 10 de la mañana cuando uno de los varones de las familias desplazadas escuchó voces en un montículo que se encuentra a unos 200 metros de su casa.
“Escuché que alguien platicaba allá abajo de los árboles y fui a ver, cuando los vi más o menos de cerca les pregunté que qué buscaban, fue cuando uno de ellos volteó ya con el arma (un AK-47) en la mano y apuntándome. Entonces me tiré al sueño y me fui rodando”, relató.
Dijo que las ráfagas del arma fueron escuchadas por su hermano que vive en otra casa muy cerca de la suya y salió corriendo con un rifle 22, mientras que él fue por una pistola a su casa.
Las detonaciones también fueron escuchadas por los policías ciudadanos que pertenecen al SSC, quienes se encontraban en la comunidad de La Unión, que se encuentra a menos de un kilómetro delante de La Palma II y llegaron de inmediato a ver qué pasaba.
El comandante del SSC, René Gutiérrez, reportó que se trataban de cuatro hombres armados los cuales dos perecieron en el enfrentamiento, uno logró huir y el otro fue capturado.
El grupo de hombres armados todavía fue alcanzado cuando intentaba cruzar de oriente a poniente la carretera Tierra Colorada-Cruz Grande, a la altura de La Palma II, en donde se originó el enfrentamiento.
Uno de los agresores cayó abatido de varios disparos antes de cruzar la carretera, junto a su cuerpo había un arma AK-47 de las conocidas como cuerno de chivo.
Un segundo agresor alcanzó a cruzar la carretera pero fue alcanzado por los disparos a unos 6 metros de la cinta asfáltica, su cuerpo estaba tirado en medio de la maleza.
Cerca de la carretera también fue detenido un tercer agresor por los elementos de la policía ciudadana y quedó bajo su resguardo, mientras que por lo menos otros dos lograron darse a la fuga.
Merodeaban desde el viernes

La Palma II se encuentra a unos 30 minutos de Ayutla rumbo a Cruz Grande y  a menos de un kilómetro de La Unión, adonde pertenecen.
Integrantes de las familias desplazaba declararon que hasta allí llegaron los integrantes del grupo agresor desde el viernes, cuando comenzaron a preguntar por los nombres de los integrantes de las familias de quienes viven allí.
“Uno de ellos llegó en taxi con el argumento de que nos llevaba roba, pero ya no llegó (a ninguna de las casas) se regresó luego”, dijo una de las mujeres.
También uno de los hombres muertos que alcanzó a cruzar la carretera fue identificado como parte del grupo que el viernes fue a Coapango, una comunidad que está antes de La Palma viniendo de Ayutla a Cruz Grande. Allá también preguntó por los nombres y apellidos de las familias.
Los vecinos de La Unión informaron que ese mismo grupo de hombres dejaron la camioneta en la que se transportaban, que quedó bajo resguardo de la policía ciudadana igual que el detenido.
El vehículo y el detenido habrían sido trasladados a la comunidad de Ahuacachahue, comunidad que es el bastión del movimiento de autodefensa que ahora se ha convertido en el Sistema de Seguridad Ciudadano, sin embargo la información no fue confirmada por los dirigentes, “por motivos de seguridad”.
Al lugar llegó antes de la una de la tarde un agente del Ministerio Público y una perito de la Procuraduría de Justicia, quienes en todo momento se negaron a proporcionar datos del caso. Incluso negaron el nombre de uno de los asesinados al que le hallaron una credencial de elector y sólo se logró saber que era originario de La Barrita, municipio de Petatlán. También se supo que el detenido reveló que es originario de Coyuquilla Norte, igual del municipio de Petatlán.
La dirigencia del SSC no quiso proporcionar datos del caso, hasta que llegara el dirigente de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio, expresaron.
La policía ciudadana impidió que el personal del Ministerio Público y elementos del Ejército que llegaron al medio día se llevaran el cuerno de chivo que quedó tirado al lado del cuerpo del hombre que cayó muerto a unos dos metros antes de cruzar la carretera.
Los cuerpos permanecieron tirados hasta a las 5:30 de la tarde cuando llegó Plácido Valerio, quien autorizó al personal del Servicio Médico Forense (Semefo) que realizara el levantamiento

Llegó la esposa del alcalde

Testigos informaron que aproximadamente una hora después del enfrentamiento llegó la esposa del presidente municipal, Hortensia Aldaco, quien preguntó por lo que había pasado con sus trabajadores y cuando un elemento de la policía ciudadana le preguntó sorprendido si los muertos trabajaban para ella, y le enseñaron el arma tirada al costado de uno de ellos, corrigió: “no a ellos ni los conozco, yo dije que la camioneta que se llevaron es mía”.
En el transcurso de las horas que los cuerpos permanecieron tirados, hubo vecinos de las comunidades cercanas que llegaban y al observar el cuerpo tirado cerca de la carretera, expresaban “ese es guarura del presidente municipal”, sin embargo la versión no fue confirmada oficialmente por el hermetismo con que fue tratado el caso.