Autoriza el IFE al PRD pago de deuda por plantón del 2006 en mensualidades

Con la oposición del consejero presidente, el Instituto Federal Electoral (IFE) aprobó permitir al PRD pagar en 8 mensualidades una deuda a un particular por 25 millones 134 mil 634 pesos, derivada del plantón que por 47 días mantuvo de Reforma al Zócalo el candidato que ese partido postuló a la presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador, en 2006.
Merced a la resolución que adoptó la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el Consejo General del IFE se vio inexcusablemente obligado a acatar el mandato respectivo. El PRD, al inicio de la sesión extraordinaria, hizo una petición para que pudiese cubrir el pago en ocho mensualidades.

Agradece Zambrano la decisión

El presidente del PRD, Jesús Zambrano, celebró la autorización del IFE a ese partido para saldar en ocho mensualidades sus deudas con un particular.
Admitió que esa decisión del organismo perjudica menos al sol azteca.
“Peor hubiera sido que ni en pagos de ocho meses nos la hubieran aplicado. Nos perjudica menos, diría yo”, indicó Zambrano en entrevista.
No obstante, pese a que el caso fue visto por la Suprema Corte, el perredista dijo que su partido interpuso un recurso legal contra la sanción, y confió en ganarlo.
“Está en curso un litigio que tenemos interpuesto por falsificación de documentos en tribunales, si lo hacemos valer pronto, entonces ni en pagos tendremos que cubrir el pretendido adeudo”, dijo.
La deuda fue contraída con el proveedor que llevó carpas, lonas, escenarios, plataformas y equipo de audio al plantón que en 2006 instaló Andrés Manuel López Obrador en Paseo de la Reforma y en calles del Centro Histórico.
Los 25 millones 134 mil 634 pesos que adeuda el sol azteca -más intereses moratorios- a Rafael Goycoolea Incháustegui comenzarán a ser cubiertos a partir de agosto próximo con parte de las prerrogativas que mensualmente recibe ese partido.
El proveedor hubo de recorrer, en palabras de la consejera Macarita Elizondo, “una travesía” que desembocó en una “cadena impugnativa” con dos amparos ante el juez de distrito en Materia Civil, tres recursos de revisión ante el Tribunal Colegiado en Materia Civil y un recurso de apelación ante la Sala Superior, antes de que la Suprema Corte ejerciera facultad de atracción.
A la postre, prevaleció el fallo del tribunal colegiado, que ordenó el embargo de las prerrogativas del PRD, y que el IFE debió acatar como “cosa juzgada”.
El consejero presidente, Leonardo Valdés, votó en contra de la decisión de la mayoría de siete consejeros.
“Me separo de la reflexión de las consejeras y los consejeros respecto a la propuesta del Partido de la Revolución Democrática, en el sentido de hacer la retención en ocho mensualidades.
“Y me separo de esa propuesta porque… hay una pena por parte del propio juez para que el partido en este caso declarado responsable para pagar las facturas correspondientes, cubra una tasa de interés del seis por ciento anual sobre los saldos de la deuda correspondiente, hasta la total liquidación de ese adeudo”, dijo.
A juicio de Valdés, “el cálculo sobre ese interés se retendría en el momento en que se cubra la totalidad del acuerdo; mientras que si se extiende este pago por más mensualidades o por las mensualidades propuestas, el interés seguirá corriendo”.
Y tratándose de recursos públicos que la Constitución designa a las actividades de los partidos, agregó, “no es lo más conveniente que ese financiamiento público se dedique al pago de intereses”.
Al comenzar el análisis, Camerino Márquez, representante del PRD, informó que entregó a los consejeros una tarjeta para hacer saber de “los compromisos de nuestros ingresos y egresos”, razón por la cual planteó cubrir “en ocho exhibiciones” la deuda con Goycoolea. (Mayolo López y Claudia Guerrero / Agencia Reforma / Ciudad de México).