El deshielo en el Ártico costaría al mundo unos 60 trillones de dólares, según especialistas

Diana Saavedra / Agencia Reforma

Ciudad de México

Las emisiones de metano causadas por el deshielo en el Ártico, específicamente en Siberia, podrían costarle al mundo 60 trillones de dólares, es decir, el equivalente a la economía mundial en 2012, calculan especialistas británicos.
Gail Whiteman, Peter Wadhams y Chris Hope, de la Universidad de Cambridge, reportan en la más reciente edición de la revista Nature que el impacto global del calentamiento es una bomba de tiempo económica.
“La inminente desaparición del hielo durante el verano en el Ártico tiene enormes implicaciones tanto para la aceleración del cambio climático, como para la liberación de metano que ha permanecido atrapado en el permafrost”, indicó Wadhams en conferencia de prensa.
Durante varios años se han generado discusiones que asumen que la apertura de la región sería benéfica, económicamente hablando, pues contiene al menos un 30 por ciento del gas, 13 por ciento de petróleo en el mundo y las rutas de navegación podrían incrementar el comercio que generarían ganancias por unos 100 mil millones de dólares en 10 años.
“Sin embargo, debido a la ausencia de medidas de mitigación, la liberación de 50 gigatoneladas de metano por más de una década de deshielo del permafrost bajo el mar de Siberia Oriental, al norte de Rusia, generaría pérdidas por unos 60 trillones de dólares, cifra comparable al tamaño de la economía mundial durante el 2012”, añadió Whiteman.
El 80 por ciento del costo será asumido por las naciones en desarrollo que deberán enfrentar climas extremos, fallas en los sistemas de salud y baja producción agrícola. Adicionalmente, todas las naciones serán afectadas, por lo que deben preocuparse por los cambios que se dan en la región, advierten los especialistas.
Las estimaciones fueron realizadas con una versión actualizada del modelo utilizado en 2006 para el Informe Stern sobre la Economía del Cambio Climático, el cuales actualmente utilizada por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos.