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Crece la veneración por santos polleros en la frontera norte

Natalia Vitela / Agencia Reforma

Ciudad de México

Ante los riesgos en el cruce fronterizo, que aumentarán de aprobarse la reforma migratoria de EU, así como la presencia del crimen organizado, los migrantes, suelen venerar a figuras protectoras como los santos “polleros”.
Especialistas en religión y migración del Colegio de la Frontera Norte (Colef) indicaron que se trata de santos populares, no reconocidos por una doctrina formal, como Juan Soldado y la Santa Muerte.
Alberto Hernández, investigador del Colef, dijo que la devoción a la Virgen de Guadalupe ya no es suficiente, porque para los migrantes ya no sólo es el hecho de que los “agarre la migra”, sino que pueden perder la vida en el cruce.
“La criminalización y muerte refuerza estas figuras que son para ciertas cosas más efectivas que la Virgen (de Guadalupe)”, expuso.
Para el sociólogo José Manuel Valenzuela, del Sistema Nacional de Investigadores, el surgimiento de estos santos populares transfronterizos también tiene que ver con la indolencia y ausencia de la jerarquía católica.
“Frente a precarización social, no es gratuito que este tipo de santos populares estén teniendo tal nivel de popularidad”, señaló.
El Padre Pedro Pantoja, de la Casa Migrante de Saltillo, precisó que quienes trabajan con migrantes en 12 casas en todo el norte del País son los únicos que están dando la cara “ante la deportación supuestamente humanitaria que se recrudeció en el sexenio de Felipe Calderón”.
Tras calificar a Juan Soldado como “pseudo santo” protector de narcos, polleros y migrantes, Pantoja indicó que tiene altares en Tijuana y en San Diego.
“Uno no puede lastimar la fe de la gente cuando muchos migrantes, cristianos y no cristianos, lo invocan. Se ha convertido en un símbolo de protección.
“Está relacionado con la delincuencia y ha entrado en el santoral de la gente migrante. Su aventura es tan peligrosa que puede ser comprendida esta situación”, comentó.
El Padre Pantoja también se refirió a San Toribio, quien, dijo, fue un mártir de la guerra cristera.
“Los campesinos comenzaron a comentar que alguien los protegía, que incluso aparecía un hombre que no sólo los alentaba a seguir adelante, sino que les decía por dónde burlar a la migra, incluso algunos llegaron a decir que les daba dinero”.
El investigador José Manuel Valenzuela indicó que son santos proscritos, no reconocidos por la Iglesia; no obstante, dijo, entre 95 y 98 por ciento de los juansoldadistas, los malverdistas, los fidencistas y los santamuertistas son católicos.
Mencionó que otros santos transfronterizos de gran popularidad son Jesús Juárez Mazo y José de Jesús Fidencio Constantino Síntora, mejor conocidos como, Jesús Malverde y el niño Fidencio, respectivamente.

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