Violentan las instituciones de justicia los derechos de los pueblos indígenas, dice una abogada en Tlapa

Realizan el Primer Encuentro de Pueblos Originarios de la región de La Montaña de Guerrero, como parte de las actividades por el Día Internacional de los Pueblos Indígenas

Carmen González Benicio

Tlapa

En el Primer Encuentro de Pueblos Originarios de la región de La Montaña de Guerrero se mencionó que las instituciones de justicia cometen violaciones y discriminan a los indígenas, insistieron en el rechazo a la minería y pidieron reconocimiento a la Universidad de los Pueblos del Sur (Unisur).
La actividad se realizó en el contexto del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, convocada por la Regiduría de Asuntos Indígenas e incluyó pláticas sobre los derechos individuales y colectivos de los pueblos indígenas.
La abogada Silvia Vázquez Paz afirmó en su ponencia que en la región se cometen violaciones y discriminación por las mismas instituciones al no contar con traductores indígenas o médicos especialistas para atender a las personas.
“Cuando un indígenas llega al Ministerio Público no le hacen caso porque no entienden su lengua, faltan médicos legistas en el caso de agresiones físicas y tienen que volver una y otra vez hasta que los atienden, o configuran delitos, como la trata de personas, cuando forma parte de la cultura que al juntarse una hija pidan animales, dinero y otros objetos”, dijo.
Agregó que hay muchos indígenas en la cárcel por un mal proceso realizado desde las instituciones que no toman en cuenta las características específicas de los indígenas ni las leyes y convenios que los amparan.
Ahí, estudiantes de la Unisur con sede en Metlatónoc le preguntaron cómo podían exigir el reconocimiento de sus institución y les respondió que echaran mano de la ley 701, La Constitución y los tratados internacionales, porque ahí se incluye el derecho a la educación.
Les dijo que hay otras formas de exigir el reconocimiento, con luchas y movilizaciones, “pero eso lo podemos platicar en corto, porque dirán que estoy alborotando”, dijo. La Unisur en este poblado cuenta con 45 alumnos.
Los jóvenes de la Unisur pidieron respeto a su pueblo na savi y que si no se daban a entender no era porque fueran ignorantes sino porque hablaban diferente, en su lengua.
Dijo que ahora hablaban porque por más de 500 años los han ignorado, pisando su cultura y negándoles la justicia “aquí se vende o se queda inconclusa”, dijo una joven.
Se habló sobre la Defensa del territorio: reserva de la biosfera y minería en Guerrero por el indígena me´phaa Saúl Moran Oropeza, quien hizo un recuento de los movimientos en contra de este proyecto que supuestamente está suspendido pero siguen los embates del gobierno para que se haga y los condicionan en los programas como incendios, pagos por servicios ambientales, entre otros.
Sobre este tema, se invitó a los escasos asistentes a que se unieran contra la minería porque no sólo afectaba a los pueblos que se encuentran en la parte alta si no a los de abajo “aquí pasa el río, que junta el agua de las montañas, de aquí se saca en pozos y si viene contaminada nos enfermaremos como pasa en otros lados”.
Dijo que también era necesario ordenar el crecimiento de la ciudad porque no había áreas verdes para que funcionen como zonas de recarga del agua,dijo quien se identificó como parte de la Red Macuilxóchitl.
Un participante mencionó que los drenajes son la fuente principal de contaminación de los ríos, lo que es lamentable porque los presidentes municipales sólo ven el recurso que se invierte sin ver lo que afecta aunque se construyan lagunas de oxidación.
Como parte de la actividad se realiza una feria artesanal en el Zócalo de la ciudad con huipiles de Metlatónoc y Cochoapa el Grande, de Acatlán, Chilapa, cajas y lacas de Olinalá y Temalacatzingo.