Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Aprueban panistas entre gritos y golpes la reforma a sus estatuto

*El aval al llamado proyecto de “armonización” se consiguió en una sesión que apenas logró el quórum requerido y en la que se armó un zafarrancho con la protesta de cientos de delegados

Mayolo López y Claudia Salazar / Agencia Reforma

Ciudad de México

Entre golpes, jaloneos y reclamos al líder del PAN, Gustavo Madero, la Asamblea Nacional de ese partido aprobó ayer la reforma a sus estatutos.
El aval al llamado proyecto de “armonización” se consiguió en una sesión que apenas logró el quórum requerido y en la que se armó un zafarrancho con la protesta de cientos de delegados.
Los inconformes alegaron que el plan había sido rechazado por la mayoría de los 4 mil 934 delegados.
El proyecto, con el que se buscaba concluir la reforma iniciada en la asamblea interrumpida en marzo, confirmó que los militantes podrán elegir mediante voto directo a sus dirigentes nacionales y estatales.
Sin embargo, paralelamente, creó una Comisión Permanente que tomará decisiones de carácter coyuntural, con lo que se acotan las decisiones de los líderes elegidos por los militantes del blanquiazul.
Marko Cortés, quien conducía los trabajos de la sesión, preguntó a la asamblea si el proyecto estaba suficientemente discutido y estimó que la mayoría lo respaldaba a mano alzada.
A partir de ahí, la protesta arreció paulatinamente.
Primero, con un coro de “¡No!” desde las gradas.
Después, con la irrupción de decenas de furiosos delegados, quienes, al grito de “¡Fraude!, ¡fraude!”, atravesaron el cerco de seguridad para lanzar sobres y boletas de votación contra quienes estaban en el presídium, donde se encontraba Madero.
Antes, 6 oradores, 3 a favor y 3 en contra, habían abogado para su causa.
Los promotores del proyecto argumentaron que, por primera vez, toda la militancia podría elegir, con su voto, a sus dirigentes.
Los opositores, sin embargo, alegaron que se había desdibujado el espíritu de la propuesta original aprobada en marzo, amén de que la nueva Comisión Permanente concentraría más poder que el propio Comité Ejecutivo.
“Es preocupante lo que pasa. Está claro que no hay un consenso (…) No se siente armonización”, señaló el senador Ernesto Ruffo.
“¡Madero, eres un tramposo!”, “¡Estás vendido con Peña Nieto!” y “¡Déspota!” le gritaron al dirigente blanquiazul decenas de delegados agolpados frente a la mesa de conducción de los trabajos.
Madero y los suyos aguantaron el vendaval y decidieron apurar la discusión relativa a los estatutos, que visto el desorden con que se conducía la asamblea, se desahogó en unos 45 minutos.
La secretaria general, Cecilia Romero, informó que los asuntos en cartera se habían agotado y afirmó que sus trabajos concluían.
En entrevista posterior, el senador Javier Corral atribuyó el sainete a una “intentona porril” encabezada por el consejero Jorge Manzanera y, según dijo, en la que participó algún grupo calderonista.
En opinión de Corral, el voto fue mayoritario para que fuese aprobado el proyecto armonizador, por lo que los esfuerzos que empujó Madero para que concluyeran los trabajos, dijo, resultaron convenientes.
Con los resultados de esta Asamblea, el próximo presidente del partido y los jefes estatales serán electos por el voto del militante de a pie. La gestión de Gustavo Madero, que aún no decide si buscará o no la reelección, concluye el 4 de diciembre próximo.
Los improperios caían sobre un impasible Madero, quien se limitó a tomar fotos con su celular.
En punto de las 13:30, después de que aprobara en fast-track la reserva de los artículos que quedaron pendientes, el dirigente panista clausuró los trabajos de la asamblea.
“Regresen en paz”, dijo a los delegados.

Libra Madero su reforma

Luego del sainete ocurrido ayer en la Asamblea Nacional, Gustavo Madero, dirigente nacional del blanquiazul, lucía exultante.
Entre golpes, jaloneos y denuestos en su contra, Madero había logrado la aprobación de la reforma a los estatutos del blanquiazul.
“Nuncamente. Me arrojaban papeles para ver si decaía el ánimo, pero nuncamente”, afirmó después en conferencia de prensa.
Sin embargo, durante el debate le llovieron improperios.
“Tramposo. ¡Madero, eres un tramposo! “¡Déspota!” “¡Bola de corruptos!”, fueron algunos de los calificativos que le dirigieron los delegados inconformes.
Testigo de lo que acontecía, la senadora Luisa María Calderón, hermana del ex presidente Felipe Calderón, sólo movía la cabeza en señal de desaprobación.
Una apresurada decisión de quien conducía los trabajos, el michoacano Marko Cortés, quien consideró que los delegados habían respaldado con su voto la aprobación del proyecto de armonización, irritó a los delegados.
“¡Nooooo”!, gritaron los inconformes.
Luego se escuchó fuerte la consigna de “¡Fraude!” “¡Fraude!”. Una turba decidió bajar a nivel de escenario y, con golpes de por medio, se acercó a unos cuantos metros de la mesa del presídium, ante un Madero que endureció el rostro.
Al lado del dirigente del blanquiazul volaban proyectiles, papeles, sobres de votación y hasta un plátano que golpeó el hombro derecho de Marko Cortés.
El senador Javier Corral, quien desde la Asamblea Nacional de marzo pasado propuso el voto de la militancia para elegir a sus dirigentes, echaba la culpa a Marko Cortés de haber propiciado el alboroto al dar por buena la aprobación del proyecto de armonización por dos terceras partes de los cuatro mil 934 delegados.
“Lamento que el moderador (Marko Cortés) haya cantado tan rápido la victoria de la Asamblea. Era tan evidente que debió haber permitido que la propia Asamblea viera que había  mayoría. Cuando trata de marcar la mayoría calificada, es cuando la gente se siente atropellada”, resumió el senador chihuahuense.
Pero los senadores Javier Lozano y Ernesto Ruffo discreparon de Corral: “Estamos extrañados de que las cosas se den de esta manera. Aparentemente, hay duda sobre la votación y la molestia es evidente. Se perdió el control”, dijo Lozano.
“Está claro que no hay consenso: dos terceras partes son un consenso y lo que estoy viendo es que no se siente tal armonización. Se podría haber repetido la votación”, evaluó Ruffo.
Arropado por integrantes del CEN, Madero presumió la certidumbre jurídica de los cambios aprobados.
Cuestionado sobre por qué no se había repetido la votación, el dirigente panista lo consideró innecesario: “Nunca hubo ninguna duda: fue absoluta y contundentemente mayoritaria la expresión”, sostuvo.

468 ad