Con caravana en La Montaña, llama la CRAC a manifestarse en contra de la reformas federales

*Visita Tlapa, Alpoyeca, Huamuxtitlán, Tlatlauquitepec y Olinalá y se pronuncian en contra de la delincuencia y del hostigamiento del Ejército y la Marina que los desarma. Recibe muestras de solidaridad a donde acude

Carmen González Benicio

Huamuxtitlán, Tlatlauquitepec y Olinalá

Autoridades y efectivos de las policías comunitarias de Huamuxtitlán, Tlatlauquitepec, San José Buena Vista y Olinalá adscritas a la Casa de Justicia de El Paraíso, en Ayutla, de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) realizaron una caravana vehicular en la región para unirse en contra de las reformas del presidente, Enrique Peña Nieto.
En su recorrido que inició en la cabecera municipal de Huamuxtitlán, cerca de las 9:00 de la mañana, mencionaron que su actividad era para manifestarse contra las reformas estructurales que promueve el gobierno federal como la energética que aseguran que busca privatizar a Petróleos Mexicanos (Pemex), la fiscal que busca incrementar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y gravar medicamentos y medicinas así como el alto cobro de la energía eléctrica y la educativa, entre otras.
La Policía Comunitaria tomó la vía federal Puebla-Tlapa con la participación de 14 vehículos entre camionetas, autos compactos y de servicio que trasladaban entre 12 o 20 efectivos, según el tipo de carro.
A su paso la gente los saludaba, les gritaba en señal de apoyo o simplemente observaba la caravana que formó una amplia fila. Su primera parada fue en la cabecera municipal de Alpoyeca, en donde acordaron cómo iban a circular y que llegando a Tlapa “el pueblo más grande” iban a pasar caminando para invitar a la gente a que se uniera al movimiento.
Cerca de las 12 del día, los comunitarios entraron a Tlapa, sonaron los cláxones de sus unidades para llamar la atención que ya atraía la mirada de las personas por el grupo numeroso que se formaba en las calles. Ahí los ciudadanos les tomaban fotos con su celular, les aplaudían y una patrulla de Tránsito Municipal les abrió camino.
Al llegar a un centro comercial, los comunitarios se bajaron de los carros formando columnas a los costados y así iniciaron  su paso por el centro de la ciudad a pie.  Empezaron a repartir volantes informativos y a gritar “fuera la delincuencia de Tlapa, fuera”, se escuchaba al unísono. También le pedían a la gente que se uniera al movimiento comunitario y que se movilizara por exigir un cese al hostigamiento del Ejército y la Marina, que no los desarmaran y les devolvieran las armas  decomisadas.
Su paso fue por el primer cuadro de la ciudad  hasta salir al río Jale, tomaron la avenida Heroico Colegio Militar y siguieron hacia el mercado nuevo, donde los vecinos les regalaron agua. Ahí nuevamente subieron a sus unidades, era la una de la tarde.
La dinámica de la caravana fue que en cada poblado sonaban sus cláxones y entregaban volantes, como en Axoxuca, Chiepetepec. Ahí la población salió o se asomaba por las ventanas. El paso se detuvo porque una camioneta se descompuso y tuvieron que jalarla y los que iban a bordo se redistribuyeron para continuar.
A las tres de la tarde la caravana llegó a Tlatlauquitepec, en donde habló la coordinadora de Olinalá, Nestora Salgado quien dijo que  su recorrido era una protesta contra el alza de los precios de la canasta básica, el gas, la luz eléctrica y porque les impedían el libre tránsito y el gobierno los hostigaba.
Llamó a las mujeres presentes a luchar por sus hijos, “ya lo hacemos con nuestros maridos cuando los golpean”, dijo.
Intervino un indígena y dijo que era bueno que quisieran organizarse y defender a sus pueblos porque le habían dicho que en la comunidad de Amiltepec estaban enterrando a un niño que habían matado para robarle su ganado, “hay grupitos malos”.
El coordinador de Huamuxtitlán, Miguel Vitrago dijo que no estaban de acuerdo con las acciones del gobierno ni con sus políticas que afectan la economía de los consumidores y que por eso hacían la marcha para informarles e invitarlos a que se unieran contra esas decisiones de privatizar y subir los costos de los productos básicos. Pidió un reconocimiento a las mujeres porque sacan adelante a sus familias.
Después de esos comentarios la caravana salió a Olinalá, en el camino llovió lo que hizo el paso más lento.  A las cinco y media de la tarde entraron al poblado donde la gente les gritaba y les daba la bienvenida. Hicieron un recorrido por sus calles y mediante una bocina pedían comprensión y que la población se uniera a su movimiento que busca proteger a la población, ahora de las reformas. También se pronunciaron en contra de la minería.
La caravana pasó a un costado del Ayuntamiento, en donde los observaron los policías municipales, en una calle se toparon con el director de Seguridad Pública municipal que fue retenido y se saludaron.
Llegaron al Zócalo donde cerraron una calle momentáneamente mientras se bajaban al centro de la plaza para dar su mensaje. Ahí participó Cristóbal  Rendón quien pidió que ya pare la delincuencia porque hay familias enteras que dejaron sus casas debido al crimen.
Llamó a los gobiernos municipales, el estatal y el federal a que los respeten porque cuando se detiene a un policía comunitario se meten con toda la CRAC, una institución  que no permitirá el hostigamiento, ni la represión militar.
Dijo que la CRAC retiene a los que roban, secuestran y matan, no a la gente inocente que se ve rebasada por la delincuencia organizada que recluta jóvenes para enseñarles a matar y a descuartizar.
Pidió diálogo a los gobiernos y dijo que si el Ejército se enoja es porque se siente agredido pero que como ciudadanos tienen el derecho de portar armas, no es que estén en contra ellos.
Nestora llamó a sus paisanos a que confíen en ellos y que no se dejen engañara por la mala información “lo que buscamos es seguridad para todos”.