Las quejas de restauranteros de Caletilla y Bonfil, porque se vivió un verano pobre, dice Bergeret

Salvador Serna

El presidente del Centro de Investigación y Estudios Turísticos de América Latina (CIETAL), con sede en Acapulco, Roger Bergeret Muñoz, opinó ayer que si los restauranteros de las playas Caletilla y Bonfil se han quejado de la actual baja afluencia turística es porque “el puerto vivió un verano pobre”.
Entrevistado en su oficina, el también director de la Maestría en Turismo de la UAG sostuvo que “si los restauranteros de Caletilla y Bonfil se declaran en quiebra y que los segundos van a pedir sumarse a la UPOEG para proteger sus negocios, es porque Acapulco es el destino turístico más pobre de México. De acuerdo con el último estudio del Coneval tenemos el 14 por ciento de pobreza extrema en el puerto, no lo digo yo, lo afirma el Coneval, esa es la realidad que el gobernador se niega a aceptar”.
Señaló que la política turística del gobierno estatal “es un caos y fracaso totales, creo que los secretarios de Turismo, Javier Aluni Montes y Netzah Peralta Radilla, son los artífices del abandono en la gestión de la cartera turística estatal y municipal, nada más andan paseando y no toman en cuenta a los observatorios académicos turísticos, los ignoran por completo porque han argumentado que no somos empresarios del ramo que solo servimos para dar clases, vaya arrogancia”.
Recordó que todavía está latente el faltante de “100 millones de pesos para el desarrollo, fomento y promoción del turismo que fueron desviados desde hace unos años ¿dónde están?”.