27 julio,2018 6:19 am

Atacan tianguis de trueque en el Estado de México


Margarita Warnholtz

Desde hace muchos años (“desde tiempos inmemoriales”, afirman los involucrados), todos los martes se instala un tianguis de trueque en el municipio de Santiago Tianguistenco. En este mercado no se utiliza dinero, todo funciona con base en el intercambio, principalmente de leña muerta por alimentos diversos.
Cada semana bajan personas de comunidades marginadas con su cargamento de madera para adquirir comida para sus familias. Por su parte, personas de otras comunidades donde cultivan diversas hortalizas, o aquellos que venden comida preparada, o gente a la que le sobra ropa o zapatos, se instalan con su mercancía para cambiarla por la leña, la cual utilizan todos los días en su casa. Todos salen beneficiados.
La leña que circula es de madera seca, de árboles caídos o sobrantes que dejan los talamontes. Cortar árboles sería dañar a la madre tierra, dicen los asistentes al tianguis, conscientes de la importancia de cuidar el medio ambiente.
De este tianguis dependen para su alimentación alrededor de 400 familias otomíes, nahuas y tlahuicas de Ocuilan, Jalatlaco, Santiago Tianguistenco y otros municipios de la región. Es además uno de los pocos lugares donde se conserva la tradición indígena prehispánica del trueque, a pesar de que se localiza a escasos 37 kilómetros del Centro Comercial Santa Fe.
Parece ser que a las autoridades y a los comerciantes de la región no les convence o no les conviene este sistema de intercambio, pues el acoso a los truequeros no cesa desde hace casi 20 años. Hay personas que han sido detenidas por la Procuraduría de Justicia del Estado de México con el argumento de que la leña que intercambian es ilegal, mientras que los verdaderos taladores ilegales van y vienen por las carreteras impunemente. Ante los incesantes ataques, desde hace varios años se organizaron en el Consejo Indígena del Tianguis de Santiago Tianguistenco.
El lunes pasado (23 de julio), integrantes del mencionado consejo, encabezados por la dirigente Ernestina Ortiz Peña, denunciaron ante la prensa, después de realizar en un mitin frente a la Cámara de Diputados mexiquense, los hostigamientos que sufren por parte de otros comerciantes y del presidente municipal de Santiago Tianguistenco, Antonio Barrera Alcántara. Afirmaron que el espacio está siendo invadido por fayuqueros y otros comerciantes de “baratijas” cercanos al alcalde, que nada tienen que ver con las prácticas tradicionales que se llevan a cabo en ese lugar e informaron que desde hace un año interpusieron una queja ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México pero la situación no ha cambiado.
Al día siguiente de su protesta, el martes de trueque, fueron amenazados y atacados por personas del Comisariado de Bienes Comunales de Coatepec, aliadas del presidente municipal. Un miembro del consejo fue golpeado y a Ernestina Ortiz le arrebataron su celular. Según afirmó, cuando solicitaron el apoyo de la policía estatal, los elementos que acudieron, lejos de ayudarlos, se quedaron mirando cómo los atacaban y protegieron a los agresores hasta que se retiraron del lugar.
No es la primera vez que integrantes del Consejo Indígena del Tianguis de Santiago Tianguistenco han sido atacados, incluso Ortiz Peña está incorporada al Mecanismo para la protección de personas defensoras de derechos humanos y periodistas de la Secretaría de Gobernación. Pero evidentemente eso no ha servido de nada.
Ernestina Ortiz es una mujer indígena que lleva más de 25 años dedicada a la defensa de los derechos humanos e indígenas de su pueblo. Es integrante de la Coordinadora Nacional de Mujeres Indígenas y del Congreso Nacional Indígena y ha recibido diversos reconocimientos por su trabajo.
¿Será que algún día cesarán los ataques a las y los indígenas organizados? Me solidarizo desde este espacio con Ernestina y con el resto de integrantes del Consejo Indígena del Tianguis de Santiago Tianguistenco.