8 agosto,2023 8:45 am

Ataque ruso a un edificio de viviendas en Donetsk deja siete muertos y 57 heridos

 

Los bombardeos del fin de semana se lanzaron desde Rusia ocupando espacio aéreo bielorruso, señala Kiev. La ONU condena la “intensificación” de los ataques sobre puertos ucranianos. Detienen a una mujer por conspirar para asesinar a Zelenski durante una visita a Mikolaiv

 

Ciudad de México, 8 de agosto de 2023. Ascienden a siete los muertos (entre los que se encuentra un oficial militar) y a 57 los heridos por un ataque perpetrado ayer sobre la ciudad ucraniana de Pokrovsk, en la región de Donetsk, que afectó a un edificio de viviendas, según el gobierno de Ucrania, que culpó a las fuerzas rusas de un bombardeo perpetrado con dos misiles.

A pesar de que las autoridades habían informado previamente de la muerte de cinco civiles, el gobernador militar de la región de Donetsk, Pavlo Kyrylenko, publicó en su canal de Telegram la muerte de dos personas más.

Además, anunció que entre los muertos hay un oficial militar y dos trabajadores del Servicio de Emergencias, y que entre los civiles heridos hay un menor de edad de 11 años.

El Ministerio del Interior informó en su cuenta de Telegram de que entre los heridos hay más de una veintena de policías y trabajadores de los servicios de emergencias. La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF), que brinda apoyo a las autoridades, aseguró que el segundo misil cayó cuando ya había un primer equipo de emergencia en la zona.

El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, fue la primera autoridad en informar del ataque, mediante un mensaje en redes sociales en el que lamentaba que se hubiese visto afectado “un edificio residencial común”. En un discurso posterior a la nación, expresó sus condolencias por las víctimas y puso en valor el trabajo de los servicios de emergencia en Ucrania.

“Todo el que lucha por la libertad de Ucrania salva vidas. Todo el mundo que ayuda a Ucrania derrotará a los terroristas junto a nosotros. Rusia rendirá cuentas por lo que hizo en esta guerra terrible”, proclamó Zelenski.

Las Fuerzas Armadas ucranianas registraron ayer decenas de ataques sobre sus posiciones, incluidos más de una treintena de bombardeos aéreos, y denunció los efectos de esta ofensiva sobre la población civil, en un informe publicado a última hora del día.

Mientras, el Ministerio de Defensa de Rusia informó ayer de que las tropas rusas avanzaron tres kilómetros hacia territorio ucraniano en dirección a Kupiansk, en la región de Járkov, controlada desde septiembre por Kiev.

“En la dirección de Kupiansk, los destacamentos de asalto mejoraron la posición a lo largo de la línea del frente en las áreas de los asentamientos de Olshana y Pershotravnevo, en la región de Járkov”, señaló el portavoz del Ministerio de Defensa, el general Igor Konashenkov.

Mientras, el portavoz de la Fuerza Aérea de las Fuerzas Armadas, Yuri Ignat, aclaró ayer que el último ataque masivo de las tropas rusas durante el fin de semana se lanzó desde Rusia y no desde Bielorrusia, como se había especulado.

El secretario general de la ONU, António Guterres, denunció la “intensificación” de los ataques rusos sobre puertos ucranianos, pocos días después de un nuevo bombardeo sobre la zona de Odesa, y reclamó el cese inmediato de cualquier tipo de acción contra objetivos o infraestructuras civiles.

Por otro lado, el ministro de Exteriores de Ucrania, Dimitro Kuleba, solicitó ayer a su homólogo de Estados Unidos, Antony Blinken, el envío de misiles de largo alcance ATACMS, un tipo de armamento que Kiev reclama para fortalecer sus capacidades de ataque y ganar terreno en las zonas que permanecen actualmente controladas por Rusia.

El presidente norteamericano, Joe Biden, a quien compete el visto bueno final para este hipotético envío, ya admitió públicamente que estudia ceder a la presión ucraniana con los ATACMS, un modelo de proyectiles que tiene un alcance mayor a los ‘Storm Shadows’ que el gobierno de Reino Unido autorizó el pasado mes de mayo.

Por otro lado, el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) informó ayer de la detención de una “informante rusa” por su supuesta colaboración para perpetrar un ataque aéreo sobre la región de Mikolaiv aprovechando la visita del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.

De acuerdo con el SBU, la detenida “trató de establecer la hora y la ubicación de la ruta aproximada” del presidente Zelenski, que no se pronunció sobre este posible complot. Las autoridades ucranianas sorprendieron a la sospechosa “con las manos en la masa” cuando se disponía a entregar información de inteligencia a la parte rusa.

La detenida reside en la localidad de Ochakov, en Mikolaiv, y regentaba una tienda de equipamiento militar. La pena a la que se enfrenta por estos hechos es de hasta doce años de cárcel, según las autoridades ucranianas, que difundieron en Telegram algunas de las pruebas recabadas en las últimas horas.

 

Texto: Europa Press / Foto: DPA