Las principales áreas de cultivos de amapola en el país se encuentran en Guerrero y en el denominado “Triángulo Dorado”, región comprendida entre Sinaloa, Chihuahua y Durango.
Ciudad de México, 29 de noviembre de 2018. El cultivo de amapola aumentó 21 por ciento en México entre julio de 2015 a junio de 2016 y julio de 2016 a junio de 2017, revela el informe titulado “México-Monitoreo de Cultivos de Amapola”.
Según el informe, entre 2015 y 2016 la superficie cultivada con amapola alcanzó 25 mil 200 hectáreas, mientras que en el periodo 2016-2017 se registraron 30 mi 600.
Eso “representa un incremento neto de 5 mil 400 hectáreas”, precisa el informe presentado este jueves por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).
El trabajo de estimación de la superficie cultivada con amapola en México se basó en la interpretación visual de imágenes satelitales de alta resolución espacial y misiones de verificación de campo terrestres y aéreas.
Se detectaron cultivos de amapola en la Sierra Madre Occidental, en los estados de Sinaloa, Chihuahua, Durango y el norte de Nayarit, asÌ como en la Sierra Madre del Sur, en los estados de Guerrero y Oaxaca.
Las principales áreas de cultivos de amapola en el país se encuentran en Guerrero y en el denominado “Triángulo Dorado”, región comprendida entre Sinaloa, Chihuahua y Durango.
En la presentación del informe, Antonino de Leo, representante de la UNODC en México, instó a las autoridades federales, en coordinación con estados y municipios, a adoptar nuevos enfoques y estrategias más integrales de control de cultivos.
De Leo invitó al próximo gobierno a acompañar los esfuerzos de erradicación con la elaboración y la ejecución de programas de desarrollo alternativo amplios y sostenibles en las ·reas de cultivos ilícitos.
Ello, mediante el reconocimiento de las necesidades y vulnerabilidades de las comunidades locales afectadas, y a través de una cooperación regional e internacional renovada y fortalecida.
El desarrollo alternativo, destacó, se centra en las personas y las comunidades, y no en las drogas.
“Los programas de desarrollo alternativo ayudan a los agricultores a escapar de la trampa de la pobreza de los cultivos ilícitos, con medidas que favorecen el desarrollo rural y mejoren la infraestructura, la inclusión y protección social”, abundó.
El representante puso a disposición del gobierno electo el conocimiento, la experiencia, el asesoramiento y la asistencia técnica de la organización internacional que representa en México.
“Los esfuerzos contra las drogas, el crimen y la corrupción se inscriben en el trabajo mucho más amplio del desarrollo sostenible”, acotó.
“El cumplimiento de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y la lucha contra el problema mundial de las drogas no deben existir como primos lejanos, porque son complementarios y se refuerzan mutuamente”.
De acuerdo con datos de la Procuraduría General de la República (PGR) citados en el informe, los esfuerzos nacionales de erradicación incrementaron 32 por ciento entre 2016 y 2017, al pasar de 22 mil 436 hectáreas, a 29 mil 692 hectáreas, respectivamente.
El informe fue desarrollado como parte del proyecto conjunto denominado “Sistema de Monitoreo de Cultivos Ilícitos en el Territorio Mexicano”.
Este proyecto, que goza de financiación del Gobierno de México, recibe el apoyo técnico del Programa de Mundial de Monitoreo de Cultivos Ilícitos de la UNODC en Viena, que permite proporcionar cifras reconocidas a nivel internacional gracias a la aplicación de una metodología transparente, fiable y sólida.
Con la publicación del próximo informe en 2019, el gobierno de México y la UNODC planean estimar el rendimiento de goma de opio (kilogramos por hectáreas de cultivos de amapola), el análisis y determinación del porcentaje del contenido de morfina en la goma de opio, así como la producción potencial de heroína en el país.
Texto: Antonio Baranda / Agencia Reforma
Foto: Archivo El Sur-Lenin Ocampo Torres
