11 abril,2022 2:09 pm

Aún se exige a las víctimas en el hospital Abarca orden del MP para interrumpir el embarazo

Chilpancingo Gro, 7 de mayo 2020. // Familiares de pacientes que estan internados en el Hospital General Raymundo Abarca Alarcón esperan a las afueras de este nosocomio, el cual es resguardado por efectivos de la Guardia Nacional. // Foto: Jesús Eduardo Guerrero

Familiares de una mujer de 29 años que sufre violencia sexual y psicológica de su pareja, denunciaron el caso, que evidencia que no hay coordinación para la atención adecuada y persiste la desinformación entre el personal médico sobre la NOM 046

Chilpancingo, Guerrero, 11 de abril de 2022. En el Hospital General Raymundo Abarca Alarcón de Chilpancingo se sigue exigiendo a las víctimas llevar una orden del Ministerio Público para acceder a una Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), al margen de los criterios de la NOM 046 para la atención  de la violencia familiar, sexual y contra las mujeres, los antecedentes de denuncias, y la segunda alerta de violencia de género por agravio comparado, que se declaró para corregir esta deficiencia.

Familiares de una mujer de 29 años, empleada, víctima de violencia sexual y psicológica de parte de su pareja, que identificaremos como Liz, informaron de su vivencia la semana pasada.

Indicaron que el domingo 3, Liz, con cinco semanas de gestación solicitó la IVE en el módulo de Centro Especializado para la Atención de la Violencia (Cepavi).

En atención médica, recibió indicaciones para un procedimiento vigilado de manera ambulatoria, es decir, le dieron una receta médica para continuar el tratamiento en su domicilio, y el área de Trabajo Social debía mantener la comunicación constante con ella.

De acuerdo con el protocolo de atención, indicaron que citaron a la joven el lunes 5 o el martes 6 de abril, para unos estudios, y no llegó, pero el área de Trabajo Social tampoco la contactó para saber porqué no se reportó.

El viernes 8, Liz, con malestares, pidió atención médica en el horario nocturno, donde, a pesar de contar con el expediente y una hoja firmada bajo protesta de decir verdad, le pidieron la orden del MP y la denuncia de violación.

La víctima se asustó y recurrió a sus familiares que buscaron aclarar la situación, no obstante, el caso volvió a evidenciar que no hay coordinación en los diferentes horarios para la atención adecuada de las víctimas de violencia sexual. Asimismo, persiste la desinformación entre los trabajadores sobre la NOM 046.

Tampoco hay vigilancia de una atención ambulatoria que podría salirse de control, y la consecuencia será responsabilidad del hospital.

En febrero de este año, también se denunció que objetores de conciencia del Raymundo Abarca retrasaron el servicio de interrupción a una niña me’phaa de 13 años, para que continuara un embarazo. Debido a las presiones de activistas, la Secretaría de Salud Guerrero hizo los trámites para que la menor de edad fuera atendida de manera integral en otro hospital.

El 28 de octubre de 2021, se registró en estas páginas la resistencia de médicos a intervenir a otra niña también de 13 años, que volvió a su domicilio sin atención.

Texto: Lourdes Chávez