No hay paz en la sierra, responden vecinos al obispo Salvador Rangel.
Chilpancingo, Guerrero, 30 de octubre de 2018. Vecinos de comunidades de Heliodoro Castillo (Tlacotepec) negaron que haya condiciones de seguridad para transitar por el tramo carretero de Xochipala a Filo de Caballos, municipio de Eduardo Neri (Zumpango) y Leonardo Bravo (Chichihualco) respectivamente, y que ya se haya restablecido la paz en la sierra como dijo el domingo el obispo Salvador Rangel Mendoza.
Mientras tanto, gente de Puerto La Guitarra, municipio de Heliodoro Castillo, reportó que el sábado habitantes de Pueblo Viejo, “que quieren seguir la guerra”, les fueron a balacear sus casas.
El domingo Salvador Rangel aseguró que en la zona de la sierra ya se resolvió el problema de violencia pero que la gente de Tlacotepec todavía no se atreve a cruzar por Filo de Caballos.
Sin embargo, ayer vía telefónica Carmelo Parral Oyarzabal aseguró que apenas el viernes de la semana pasada dos comerciantes que iban a Pandoloma, municipio de San Miguel Totolapan que colinda con Heliodoro Castillo, fueron asaltados entre La Laguna y Los Morros, por civiles armados.
Aseguró que ese día no había agente de seguridad estatal ni del Ejército, a quienes querían recurrir para pedir ayuda.
Contó que sus dos familiares quienes viajaban en una camioneta Nissan doble cabina fueron despojados de su vehículo y su mercancía, “y afortunadamente a uno de ellos solamente lo golpearon con un arma y al otro nomás le apuntaron con una pistola, pero salieron bien”.
Denunció que el problema es que los policías estatales y militares solamente hacen recorridos a veces pero cuando se retiran se aprovechan los delincuentes para asaltar, “entonces, nosotros no podemos adivinar cuándo vamos a viajar seguros y cuándo no”, se quejó.
Otra mujer de Pueblo Viejo, quien está desplazada debido a la violencia pero tiene familiares en la zona, aseguró que la gente de Tlacotepec todavía no puede pasar con seguridad de Xochipala a Filo de Caballos, “no se puede pasar ni de allá para acá (Chilpancingo) ni de aquí para allá”, aseguró.
Contó que hay militares en Filo de Caballos pero que solamente dan rondines, están unos días y se van. Denunció que a veces son los mismos policías estatales los que cargan “a esa gente”, en alusión a los delincuentes.
Denunció que apenas el jueves de la semana pasada entraron a la escuela secundaria de Xochipala y se quisieron llevar a un joven “porque supuestamente vendía mota”, pero la gente fue y lo rescató de los policías estatales.
Desmintió también que se haya logrado la paz en los pueblos de la parte alta de la sierra, pues dijo que apenas el sábado sus familiares de La Guitarra le llamaron por teléfono para decirle que los de Pueblo Viejo fueron a balacearles sus casas.
“Los de Pueblo Viejo quieren seguir la guerra”, denunció, y aseguró que los pobladores de este lugar cuentan con el apoyo de policías estatales que tienen su destacamento en El Gallo.
Dijo que el sábado policías estatales con gente de Pueblo Viejo instalaron un retén en Puerto San Juan, que es un paraje ubicado entre las comunidades de La Guitarra y la Vuelta, en donde estuvieron revisando vehículos y se los quitaron solamente a los habitantes de estos dos pueblos, pero no a los de Pueblo Viejo.
“Los de Pueblo Viejo se visten de policías y andan con los estatales que están destacamentados en El Callo, son cómplices”, señaló.
Sin embargo, reconoció que desde hace dos semanas han regresado los maestros y que se han normalizado las clases en las escuelas, y que también han regresado los médicos, pero insistió en que el servicio de transporte público sigue suspendido por la ruta de Filo de Caballos y que los pobladores de las comunidades de Heliodoro Castillo siguen dando la vuelta por Apaxtla o entran por Mezcala, “porque la violencia sigue igual”.
Texto: Zacarías Cervantes / Foto: Jesús Guerrero
