17 abril,2021 8:43 am

Biden rompe su promesa de elevar la cuota de refugiados y mantiene lo fijado por Trump

De 62 mil permisos que había prometido en campaña electoral, da marcha atrás a un nivel mínimo de 15 mil que impuso el magnate. La decisión, que no fue vista con agrado por asociaciones civiles y aliados en el Congreso, es motivada por la actual crisis migratoria en la frontera sur, “una situación de emergencia imprevista”, señala la Casa Blanca

Madrid / Washington, 17 de abril de 2021. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció ayer que no ampliará el número de personas refugiadas que pueden ingresar al país, tal y como prometió durante la campaña electoral, y mantendrá el mínimo histórico de 15 mil permisos fijados por su antecesor, Donald Trump.

La decisión no sentó nada bien entre las asociaciones civiles y sus aliados en el Congreso, como la representante demócrata por Washington Pramila Jayapal, quien calificó de “inaceptable e inconcebible” que la actual Administración no haya revocado “de inmediato” la cuota “dañina, xenófoba y racista de Donald Trump”.

Si bien Biden llegó a firmar una orden ejecutiva que eliminaba las categorías impuestas por Trump para delimitar quién podía acogerse al estatus de refugiado, finalmente el presidente estadunidense no amplió el número de los permisos, tras haberse incluso anunciado que podrían haber llegado hasta los 62 mil 500.

En febrero, el Presidente se comprometió a recibir a aquellos que huyen de la persecución alrededor del mundo, y a elevar la cuota de 15 mil refugiados que marcó el gobierno anterior. El Secretario de Estado Antony Blinken notificó al Congreso el 12 de febrero que la Administración planeaba permitir que hasta 62 mil 500 refugiados ingresaran al país en el año fiscal que termina el 30 de septiembre.

Para el senador demócrata y presidente del comité de Asuntos Exteriores del Senado, Bob Menéndez, mantener la directriz de Trump en esta cuestión “socava” la promesa que Biden realizó y “amenaza al liderazgo estadunidense en la migración forzada”, tal y como se lo transmitió al propio presidente a través de una carta.

La Casa Blanca explicó la decisión viene motivada por la actual crisis migratoria en la frontera sur, una “situación de emergencia imprevista” que ya habría colapsado los servicios y las oficinas federales encargadas de tramitar las peticiones de asilo.

Un alto funcionario del gobierno, que habló bajo condición de anonimato, dijo que la Administración estaba preocupada porque el aumento de los cruces fronterizos por parte de menores no acompañados era demasiado y ya había abrumado a la sección de refugiados del Departamento de Salud y Servicios Humanos.

Sin embargo, los migrantes que buscan asilo en la frontera son procesados en un sistema completamente separado del de los refugiados que huyen de la persecución en el extranjero.

Mientras que los migrantes que llegan a tierra estadunidense tienen el derecho legal de solicitar asilo y eventualmente pueden comparecer ante un juez de inmigración que determine su caso, los refugiados solicitan protección desde el extranjero y se ven obligados a aprobar varios niveles de investigación que a menudo pueden llevar años.

Desde que comenzó este año fiscal en octubre, menos de 2 mil 200 refugiados fueron admitidos en Estados Unidos, según datos del Departamento de Estado a los que tuvo acceso la cadena CBS. La cifra más baja, con Trump alojado en la Casa Blanca, data de 2020, cuando sólo 11 mil 800 refugiados pudieron entrar al país.

Texto: Europa Press / Agencia Reforma / Foto: Archivo