El equipo español va por su pase a las semifinales de la Champions League apoyado en el valioso 3-1 en el juego de ida de cuartos de final en Londres contra un club inglés que aspira a dar pelea
Madrid España, 12 de abril de 2022. El Real Madrid afronta ayer la vuelta de cuartos de final de la Liga de Campeones ante el Chelsea, en un duelo para terminar el trabajo y culminar la revancha ante el actual campeón después de su exhibición en Stamford Bridge (1-3) con un Karim Benzema excelso, mientras que los ingleses intentarán agotar sus escasas opciones de remontar en su primer partido ante los blancos en el Santiago Bernabéu.
El conjunto de Carlo Ancelotti realizó el pasado miércoles una demostración de su poderío y fortaleza en Europa ante los blues, con un partido comprometido y sólido. Todo ello apoyado en la determinación y el liderazgo del delantero francés, que volvió a ser decisivo con su segundo hat-trick consecutivo, con dos remates de cabeza extraordinarios y otro tanto de pillo, después de ser el héroe para remontar frente al PSG.
El contundente triunfo por 1-3 contra los ingleses fue el golpe en la mesa que necesitaban los blancos para afrontar con contundencia y decisión el tramo final de la temporada. Tras la debacle del Clásico y el juego tan pobre en la victoria en Balaídos ante el Celta (1-2), los merengues urgían un partido así para alejar las dudas y recuperar las buenas sensaciones.
Una muestra más de que la Champions es el mejor tratamiento contra la dubitación y la incertidumbre blancas. El mejor bálsamo, justo en el momento adecuado, para recargar las baterías de confianza de cara al momento más importante del curso.
Y el Real Madrid cerrará en el Santiago Bernabéu la defensa del favorable resultado cosechado en Londres, para continuar con su idilio con la competición y completar su segunda participación consecutiva en las semifinales de Champions. Los merengues solo han caído en dos ocasiones esta temporada en su feudo, ante el Sheriff en Liga de Campeones (1-2) y el Barça (0-4) en el doloroso clásico.
Un total de 15 victorias y cuatro empates en lo que va de la temporada para hacer de su estadio un fortín blindado. Además, los madridistas encadenan tres partidos ganando como local en Champions y han sufrido solo una derrota en sus últimos nueve duelos europeos en casa contra conjuntos de la Premier.
El Real Madrid venció (2-0) al Getafe en el trámite previo al trascendental partido de Champions, en un duelo en el que, por primera vez en lo que va de curso, Ancelotti hizo rotaciones. Courtois, que cuajó otra actuación para enmarcar; Carvajal, suplente el sábado; y Mendy, en la convocatoria tras superar sus molestias musculares; apuntan a la titularidad, en una defensa donde parece que Alaba y Nacho serán de la partida ante la baja por sanción de Eder Militao.
Modric y Kroos, imprescindibles para Ancelotti, no jugaron ni un minuto en Liga pensando en este martes, por lo que acompañarían a Casemiro en un centro de campo en el que podría repetir Fede Valverde. El uruguayo se antoja clave para liberar a futbolistas como Vinícius, que estaría más preocupado de desequilibrar a la defensa blue, como ya ocurrió en la ida.
Y es que el brasileño parece haber recuperado la frescura formando con Benzema una dupla letal que ya sufrió el Chelsea en Londres. El francés acumula 37 goles en 37 partidos oficiales con el Real Madrid, evidenciando una clara dependencia de lo que inventen las botas del ‘9’, que disfruta esta temporada de su mejor versión desde que viste la camiseta del Real Madrid.
Por su parte, los de Tuchel sufrieron en sus propias carnes el “modo Champions” del Real Madrid, que empequeñeció a unos blues, vigentes campeones de la competición, sin ninguna opción durante el partido de ida. Sin embargo, el gol de Havertz en Londres da esperanza, aunque sea escasa, a los ingleses, que deberán ganar por diferencia de dos goles para empatar la eliminatoria.
Con casi todo en contra para remontar, los londinenses se agarran a su gran rendimiento fuera de casa esta temporada. El Chelsea encadena ocho triunfos en los últimos diez encuentros, y no pierde lejos de Londres desde el 15 de enero en Liga ante el City de Guardiola. Además, los ‘blues’ no han perdido ninguno de sus últimos cuatro duelos como visitantes contra conjuntos de LaLiga Santander.
Tras el varapalo de la ida, este fin de semana el Southampton pagó los platos rotos de los de Tuchel, que transformaron su frustración e impotencia en goles para vencer en la Premier (0-6). Así, llegan al Bernabéu con algo de confianza, aunque conscientes de que es “poco probable” remontar, según reconoció el técnico en la previa.
Con las bajas de Hudson-Odoi, Chilwell, Barkley y Lukaku, este último por una lesión en el tendón de Aquiles, Tuchel podrá repetir el once de la ida, con Azpilicueta ya recuperado tras dar negativo en COVID-19. Así, Rüdiger, señalado en el tercer gol blanco por su poca contundencia, junto a James y Marcos Alonso, apunta al equipo titular, con la duda de si es Kovacic o Mount quien acompañe a Havertz y Pulisic en ataque.
Texto: Europa Press
