1 septiembre,2024 8:19 am

Buscadora no siente respaldo en situaciones de riesgo

 

Ciudad de México, 1 de septiembre de 2024. Al borde de abandonar Jalisco está una buscadora, luego de que intentaron privarla de la libertad en su domicilio, ha solicitado ayuda, sin que hasta ahora la haya recibido en situaciones de riesgo.

Ella es Ivón Gutiérrez, quien con su grupo, Buscando Corazones en Jalisco, ha localizado 13 fosas y 72 cuerpos desde 2022.

Durante sus labores, la mujer detectó con más frecuencia cada vez la presencia de personas que la vigilaban, lo que escaló este año, cuando intentaron entrar a su casa dos veces en marzo, al parecer, por una búsqueda en El Salto.

Desde entonces ha vivido otras situaciones similares. La más reciente fue el 24 de agosto, cuando vio que tomaban fotos desde una camioneta y luego a un hombre vigilando la calle en la que se encontraba ella con dos menores.

En esa ocasión intentó obtener apoyo del Mecanismo de Protección para Defensores de los Derechos Humanos, aunque no la obtuvo pese a que sus medidas de protección son de acción urgente.

La primera falla fue de la Guardia Nacional, pues en teoría debieron presentarse desde el 21 de agosto, pero más de una semana después, no habían acudido.

“La verdad estoy como sacada de onda; estoy, pues, no sé ni cómo me siento, porque se supone que si una está integrada mecanismo de protección es porque te van a atender cuando tú tengas una emergencia”, dijo.

“Supuestamente, a mí me acaban de reforzar las medidas de protección en la Junta de Gobierno pasada, me otorgaron rondines bitacorados por Guardia Nacional; ellos tendrían que haber venido desde el 21 de agosto, iban a iniciar y es día que no se han parado”.

Después le falló su botón de pánico y su analista, un contacto del mecanismo que depende de la Secretaría de Gobernación del gobierno Federal y que le recibe los reportes.

El sábado 24 le comunicó que la Guardia no se había presentado y que un vehículo y un hombre la vigilaban.

“Le dije a mi analista ‘a mí para qué me sirve un monitoreo por el botón. Y duró un rato por responderme y lo que hizo fue que me comunicó con otro analista del mecanismo”.

También intentó mandar un correo con la evidencia a la Secretaría de Gobernación, pero el mail rebotó.

El asedio ha hecho que reduzca las labores y, aunque el personal del mecanismo le propuso llevarla a otro Estado, ella se ha resistido, pues eso sería renunciar a las búsquedas.

“No sirve estar en el mecanismo porque cuando uno tiene una acción urgente nunca le brindan el apoyo necesario”, lamentó.

 

Texto y foto de archivo: Agencia Reforma