El equipo de Ancelotti no puede con una gran Real Sociedad y empata 0-0 en el estadio Santiago Bernabéu, mientras que la escuadra que dirige Xavi se impone 1-0 en su visita al Girona. El Atlético derrota 1-0 fuera de casa al Osasuna y ya es cuarto de la tabla con 34 puntos, a 13 de los culés
Madrid, España, 30 de enero de 2023. El Real Madrid no pudo y empató 0-0 con la Real Sociedad ayer en la jornada 19 de la Liga de España, en duelo celebrado en el estadio Santiago Bernabéu, un choque lleno ritmo y ocasiones, con protagonismo para Thibaut Courtois y Álex Remiro, pero sin goles para beneficio de un Barcelona que amplía su renta en el liderato.
El equipo de Carlo Ancelotti tuvo momentos de asedio, con la fuerza en el centro del campo de Fede Valverde y Dani Ceballos, más la amenaza más que seria que formaron Benzema, Vinicius y Rodrygo. Sin embargo, Remiro dejó paradas de mérito, sobre todo dos mano a manos con Vini, y el Madrid no tuvo puntería para seguir con la mejoría de juego y resultados que parecía encauzar.
Sin embargo, la Real no fue un espectador en el Bernabéu. A pesar de las bajas, más la lesión durante el encuentro de Elustondo para terminar con mucho canterano y jugadores fuera de sitio, el equipo de Imanol Alguacil creyó en sus opciones y las tuvo, también detenidas por un Courtois providencial una vez más.
El reparto de puntos aleja otro poco al Madrid del liderato de un Barça en 47, por los 42 de los blancos. La Real demostró el gen de los últimos años, capaz de competir en casa del campeón para afianzar su tercer puesto con 39 unidades.
Por su parte, el Atlético de Madrid se ha asentado en la cuarta posición de la Liga de España después de imponerse ayer, con un solitario tanto de Saúl Ñíguez en la segunda parte, a Osasuna en El Sadar y gana 0-1, tres puntos que le permiten defender su puesto en la Champions y dejar atrás la dolorosa eliminación de Copa del Rey ante el Real Madrid.
Un magnífico pase en profundidad del argentino Rodrigo de Paul lo aprovechó el centrocampista ilicitano para plantarse solo ante Aitor Fernández y hacer el único gol de la tarde en Pamplona. Con ello, los de Diego Pablo Simeone suman su segunda victoria consecutiva en la competición doméstica y alcanzan los 34 puntos en el arranque de la segunda vuelta.
En tanto, el Barcelona se impuso 0-1 por la mínima el sábado pasado al Girona, gracias al solitario gol de Pedri en la segunda mitad del encuentro, en el día que cumplió su partido número 100 como jugador culé, para darle además el “título” de invierno al equipo blaugrana.
El conjunto que dirige Xavi Hernández cerró la primera vuelta de la Liga con la continuidad de sus mejores sensaciones en este inicio del año para poner cinco puntos de por medio respecto al Real Madrid, su inmediato perseguidor en la tabla.
Como sucedió en el anterior partido liguero ante el Getafe, el jugador canario anotó el único tanto del partido, sumando así el equipo de Xavi el tercer encuentro consecutivo ganado por la mínima, tras el duelo de cuartos de final de la Copa del Rey ante la Real Sociedad del pasado miércoles.
En Montilivi, el técnico blaugrana recuperó los extremos en el ataque, con Dembelé y Raphinha acompañando a Ansu Fati. Una apuesta decidida que no terminó de funcionar cuando antes de la media hora de juego el delantero francés, que estaba cuajando uno de sus mejores momentos desde su llegada al club, se tuvo que marchar lesionado. Sin Robert Lewandowski aún sancionado, ni Dembelé’, el Barça necesitaba una alternativa exitosa.
Pedri entró al terreno de juego y aunque el control en el centro del campo se hizo notar, la solidez defensiva de los locales redujo al mínimo la sensación de peligro culé.
El Girona con un bloque defensivo bien plantado y los de Barcelona volcando todo su juego en campo rival. Precisamente fue ese futbol directo el que les permitió encontrar el premio del gol cumplida la hora de partido. Pedri volvió a ser clave con un tanto de mérito que culminó empujando al fondo de la red un centro de Jordi Alba.
Al final, Ter Stegen salvó una vez más a los suyos blocando un peligroso centro que llegó a rozar Stuani, impotente por la falta de acierto.
Texto: Europa Press
