Acapulco, Guerrero, 2 de noviembre de 2021. Durante la misa a los fieles difuntos, el arzobispo Leopoldo González González, dijo que esa celebración era para todos los que ya no están con nosotros, sobretodo para los que murieron de Covid-19, así como para los asesinados y desaparecidos para que Dios les dé el eterno descanso.
González González en su mensaje durante la misa, dijo que invita a un recuerdo especial en el corazón, muy cariñoso, “de aquellas personas que viven el gran dolor de un familiar desaparecido o asesinado. La indignación de todos y la tristeza de todas estas familias sea un severo llamado a la conversión a las bandas criminales que los han desparecido o asesinado y un fuerte reclamo de justicia a quienes han de proteger a la sociedad”.
En su homilía del mediodía en la catedral de Nuestra Señora de La Soledad, ubicada en el Zócalo, con motivo del Día de Muertos, el jerarca católico dijo que hace casi dos años, por los cuidados sanitarios de la pandemia para disminuir los contagios del coronavirus, a muchas personas no se les permitió estar presente en el sepelio de los seres queridos y “acompañarnos unos a otros en el momento de sepultar o colocar su cenizas en la cripta; esto nos dejó un hueco grande de dolor en nuestra persona”.
Texto: Karina Contreras / Foto: Fotograma tomado de Facebook
