3 octubre,2022 11:48 am

Cientos de manifestantes protestan contra la inflación en RU

 

Madrid, España, 3 de octubre de 2022. Miles de británicos salieron a las calles el sábado para protestar contra la crisis del costo de la vida, mientras el gobierno asume errores en su política presupuestaria después de una semana de caos en los mercados. La inflación está en su punto más alto, la libra esterlina está en su punto más bajo y la preocupación aumenta a medida que se acerca el invierno.

El nuevo gobierno conservador de Liz Truss prometió una acción inmediata para hacer frente a la crisis, pero el anuncio de la semana pasada de recortes de impuestos masivos para los más ricos provocó más ira e incomprensión.

“Apoyen las huelgas”, “Congelen los precios, no las personas” o “Impuestos para los ricos”, se podía leer en las pancartas de los manifestantes en Londres, que acudían al llamamiento de varias organizaciones hacia Westminster, en el centro de la capital.

Otros cientos de personas participaron en la quema de facturas de energía eléctrica, como una forma de protesta por el aumento de las tarifas debido a las sanciones de Occidente contra Rusia por la guerra en Ucrania.

La mayoría de los británicos recibieron fríamente el “minipresupuesto” presentado por el gobierno la semana pasada. Los anuncios también sacudieron a los mercados y redujeron la libra esterlina a su nivel más bajo, lo que provocó la intervención del Fondo Monetario Internacional y del Banco Central. En solo 20 días de mandato, la popularidad de Truss se desplomó y solo un 15 por ciento de los encuestados por YouGov defiende las intenciones de la primera ministra británica.

Truss reconoce errores en su plan de recortes fiscales en RU pero defiende su decisión

La primera ministra de Reino Unido, Liz Truss, ha reconocido ayer que su gabinete gestionó mal el anuncio de su nuevo programa de recortes de impuestos que ha desencadenado una de las semanas más difíciles para los mercados británicos en los últimos meses.

“Reconozco que deberíamos haber sentado mejor las bases de nuestro plan. Hemos aprendido de esos errores y creo que todavía estamos a tiempo de corregir el rumbo”, ha declarado Truss en una entrevista con la BBC.

El plan de recorte de Truss y de su ministro de Hacienda, Kwasi Kwarteng, el más agresivo en medio siglo, acabó disparando prima de riesgo de la deuda británica hasta situarla cerca de la italiana y forzó al Banco de Inglaterra a anunciar un próximo aumento de los tipos de interés.

Entre otras medidas, el plan contempla la eliminación de la tasa máxima del 45 por ciento (una decisión de la que Truss responsabilizó a Kwarteng), la reducción del 20 por ciento al 19 por ciento de la tasa básica, la eliminación del incremento del impuesto de sociedades implementado por el anterior Gabinete y la anulación del actual límite a los bonus que perciben los banqueros.

En solo 20 días de mandato, la popularidad de Truss se ha desplomado y solo un 15 por ciento de los encuestados por YouGov defiende las intenciones de la primera ministra británica.

Por otro lado, el nuevo ministro de Hacienda británico, Kwasi Kwarteng, ha sido objeto de críticas e incluso de una petición de investigación tras saberse que estuvo en una fiesta privada con directores de fondos de inversión o fondos buitre antes de presentar el polémico plan de rebaja fiscal para las rentas más altas.

El diario The Sunday Times ha publicado que Kwarteng estuvo en un acto el barrio londinense de Chelsea el 23 de septiembre en la que los directivos le animaron a defender su plan de bajada de impuestos y ha destacado que los responsables de los fondos financieros que organizaron la fiesta se beneficiaron directamente de la caída de la libra que se produjo tras la presentación del plan fiscal.

Truss ha sido interrogada por la conveniencia de que Kwarteng participara en este tipo de actos teniendo en cuenta el daño que está haciendo la inflación. “Me levanto cada mañana pensando cómo hacer que la gente de nuestro país sea más exitosa, que estén más seguros, cómo ayudar a la gente a pasar este momento difícil”, ha respondido.

“En eso es en lo que estoy centrada. En eso es en lo que el ministro de Hacienda está centrado y en lo que todo el gobierno está centrado”, ha remachado.

El presidente del Partido Conservador, Jak Berry, también presente en el polémico acto, negó ayer en declaraciones a la cadena Sky News que Kwarteng tratara el plan de rebaja fiscal en la fiesta. “No le oí hablar de eso. Le escuché hablar de su plan para generar crecimiento”, ha señalado.

Berry ha defendido las relaciones de partido con empresarios y ha afirmado que “deberían ser elogiados” por este tipo de actos que son “algo normal” para el Ministerio de Hacienda.

Por su parte, las autoridades de Escocia, Irlanda del Norte y Gales han solicitado una reunión urgente con el ministro de Finanzas británico, Kwasi Kwarteng, en respuesta al anuncio de la bajada de impuestos y reducción de los presupuestos que podrían poner en peligro los servicios públicos.

El viceministro principal de Escocia, John Swinney, y los ministros de Finanzas de Gales e Irlanda del Norte, Rebecca Evans y Conor Murphy han acusado ya a Kwarteng “jugársela a una carta” con su plan fiscal de reducción de 45 mil millones de libras (unos 51 mil 270 millones de euros) en impuestos.

Texto: Europa Press