19 agosto,2023 12:56 pm

Cómo proteger el teléfono móvil del calor

 

Madrid, España, 19 de agosto de 2023. El verano está para ser disfrutado: nadar, tomar helado, sentarse al sol, son algunas de las opciones. Sin embargo, cuando suben las temperaturas, hasta el móvil puede empezar a sudar.

Según Bitkom, asociación alemana que agrupa a las empresas de TI y comunicación, pasar demasiado tiempo bajo el sol abrasador puede dañar componentes sensibles como la batería y la pantalla. Posibles consecuencias: menor rendimiento, reducción de la vida útil del dispositivo o pérdida de datos por apagado repentino. A más tardar cuando el móvil se caliente en la mano o incluso muestre el correspondiente mensaje de error (algunos lo hacen), es hora de enfriarlo.

Estos son los consejos de Bitkom para las altas temperaturas:

– Hacer pausas: especialmente los juegos y las redes sociales con aplicaciones de uso intensivo de gráficos, así como los servicios de localización y el streaming o la grabación de vídeos pueden suponer una carga adicional para el dispositivo. Por ese motivo, se recomienda evitar su uso cuando hace calor.

– Desactivar las comunicaciones inalámbricas: el consumo de energía y la generación de calor pueden reducirse si se activa, en lo posible, el modo avión.

– Quitar las fundas: algunas fundas protectoras pueden contribuir a que el calor no se disipe correctamente. Si se tiene un teléfono que tiende a calentarse rápidamente, se puede intentar contrarrestar este efecto quitando temporalmente la funda protectora.

– Mantener la temperatura idónea: lo mejor es que el smartphone se guarde a temperatura ambiente, y es fundamental no dejarlo nunca en lugares tales como el salpicadero del coche o la toalla de baño al sol abrasador. El bolsillo del pantalón tampoco es ideal, ya que también está expuesto al calor corporal. Lo mejor es llevar el dispositivo en una mochila o cubrirlo con un paño.

– No cargar en caliente: es mejor cargar el teléfono cuando aún está frío y no se ha calentado. Especialmente en la carga rápida, el dispositivo genera mucho calor propio, por lo que un móvil ya caliente está aún más expuesto a daños.

– Enfriar el dispositivo: si el móvil ya está caliente, puede ayudar cerrar las aplicaciones y ponerlo a la sombra. Nunca se deberá colocar en un frigorífico o un congelador. Por un lado, el frío extremo puede dañar el dispositivo y, por otro, la repentina diferencia de temperatura también puede provocar condensación en el interior.

– Protección impermeable: para más seguridad se recomienda proteger el móvil del contacto con el agua con fundas adecuadas para exteriores. El agua salada, en particular, puede provocar corrosión. Según Bitkom, esto también puede ocurrir con los dispositivos que ya se consideran impermeables. El móvil no tiene necesariamente que caer al agua para resultar dañado: una humedad elevada puede ser suficiente para deteriorarlo.

Texto: PortalTic