28 octubre,2017 7:28 am

Comparte Guillermo del Toro con el público sus métodos de trabajo en FICM

Morelia, 27 de octubre de 2017. Con sala llena, el Teatro Ocampo de Morelia recibió al director Guillermo del Toro, quien desde el inicio anunció que daría una segunda clase magistral para dar oportunidad de atender su cátedra a quienes no pudieron ingresar a las 12 horas.

“(Es) el invitado más generoso que jamás hayamos tenido aquí en Morelia”, declaró Daniela Michel, directora del Festival Internacional de Cine de Morelia al presentar a Del Toro.

Guiada por Nick James, editor de Sight & sound, el realizador compartió con el público sus métodos de trabajo y lo que ha aprendido y perfeccionado a lo largo de su carrera.

“En mi caso toda mi persona es voraz. Yo vivo la vida con mucha voracidad. Ya sean tacos o ideas con la película, me lo quiero chingar todo. Si hay gente afuera quiero dar una segunda clase y si hay gente que quiere un autógrafo le quiero dar hasta la última persona. Porque creo que es la manera en que aprendí a vivir”, compartió.

Además, aconsejó a los jóvenes aprender algo de todo lo que hagan, a pesar de los resultados. De sus películas, por ejemplo, dijo que no le gustan algunas, pero de todas se ha llevado algo.

“En el cine, como la comida, tiene que haber de todo. Un día comes caviar y al otro conchas con leche”, dijo, con lo que provocó las risas de la audiencia.

También compartió detalles sobre la filmación de La forma del agua, película que presentó en el FICM y con la que ganó el León de Oro en el Festival de Cine de Venecia.

“Cuando la vean notarán que la comunión entre lo cotidiano y lo fantástico, de manera completa y no perversa, es mexicanidad. Vivimos en un país en que lo sublime y lo terrible suceden en un segundo y al segundo siguiente”, indicó.

También agradeció su labor a Alejandro Pelayo, director de la Cineteca Nacional, quien realizó la serie Los que hicieron nuestro cine.

“Vinculó la importancia de los cineastas clásicos del cine mexicano de una manera lucidisísima. Es una obra maestra. El día de hoy, para mí, es el documento histórico más importante de esa generación”, declaró.

Del Toro hizo hincapié en la importancia de la acción y llamó a quienes quieren ser directores a que se animen a tomar una cámara, de su celular o profesional, y comenzar a practicar.

“Tienes que salirte a decir ‘Estoy haciendo (cine)’. Muchas veces, la esencia del mexicano, dice (Octavio) Paz, es estar perdido en un laberinto de soledad, estamos esperando a que baje alguien y nos rescate. El pedo es que si tienes una cámara en tu iPhone, que la tienes, tienes ya más de lo que tenía cualquier persona en 1940 para hacer una película”, puntualizó.

Con la promesa de volver el próximo año, Guillermo del Toro se despidió de su primera clase para complacer a un segundo bloque de aprendices.

Nota: Fabiola Santiago- Reforma/ Foto: