Acapulco, Guerrero, 1 de abril de 2021. El sonido de música de banda, mezclada con reguetón y el beat de house, proveniente de distintas bocinas, es lo que se escuchaba en playa El Morro al mediodía, hora en que se comenzó a incrementar el número de bañistas, que en ese momento eran menos que los vendedores informales que recorren la zona de arena.
Un par de horas después, músicos de banda se sumaron a alegrar el ambiente en playa, que pusieron a bailar a turistas al ritmo de la tambora, y ahí interactuaron los ejecutantes con los visitantes sin cubrebocas.
Una familia, de ocho integrantes, ingresó a la playa con sillas, sombrillas, hielera y su propia bocina, caminando en busca de un espacio donde colocar el mobiliario que llevaban, para instalarse frente al mar el resto del día. Se mezclan con los vendedores informales, que muestran sus productos a quienes ya están acomodados en sillas debajo de una sombrilla, los cuales, una y otra vez, con un ademán rechazan la oferta de ropa, recuerdos de Acapulco, salvavidas, pulseras, tatuajes temporales, ostiones y camarones en vara.
Apenas entra a la playa una carretilla, sobre la cual van acomodados dos contenedores de mojito.
En el nuevo club de playa de la zona no hay clientes todavía, sin embargo, quienes van llegando prefirieron rentar un espacio frente al mismo, para poder disfrutar de la música que proviene del sonido del lugar. Del otro lado, aún no hay turistas ocupando el mobiliario de playa instalado.
Otros visitantes, a pesar de la música del club, decidieron rentar una bocina para poner música de su elección. Ese es el caso de cuatro amigos que llegaron hoy por la mañana a Acapulco, sin ropa de playa, que se instalaron frente al mar con pantalones de mezclilla y los tenis los han colocado sobre una de las sillas, junto con algunas bolsas donde llevan sus pertenencias.
Uno de ellos comentó que por la mañana decidieron viajar a Acapulco, y así lo hicieron. No han decidido cuántos días se quedarán, “yo creo que para lo que nos alcance el dinero”.
Un integrante de la cooperativa de prestadores de servicios turísticos eleva el paracaídas, con la intención de que alguno de los turistas se anime a volar por la bahía. Nadie se acerca a preguntarle respecto al paseo y vuelve a tender la tela sobre la arena. Al fondo se ven tres turistas prepararse para un paseo en banana, las motos acuáticas todavía no están disponibles para la renta, fue día de mantenimiento.
Son pocos los visitantes que se ven en playa El Morro, los prestadores de servicios turísticos esperan que a partir de hoy se incremente el número de bañistas y puedan tener mejores ingresos.
Texto: Mariana Labastida / Foto: Carlos Alberto Carbajal
