Unos 2 mil pobladores de nueve comunidades del municipio acompañados por civiles armados se manifestaron en la cebecera para demandar seguridad y la instalación de la policía comunitaria
Presuntamente un grupo rival emboscó a miembros de esta movilización y también quemó un autobús de pasajero y una camioneta de Marinela
En otro día de violencia hubo 3 ejecutados en Acapulco, entre ellos un degollado; dos más en Chilpancingo, otros dos en Cuajinicuilapa y uno en Arcelia
Unos 2 mil pobladores de nueve comunidades de Eduardo Neri acompañados por civiles armados marcharon en la cabecera municipal para demandar seguridad y la instalación de la policía comunitaria. Presuntamente el grupo contrario emboscó a miembros de esta movilización y causó los muertos y dos heridos, e hirió a un automovilista en la carretera federal. También quemó un autobús de pasajeros y una camioneta de Marinela en el libramiento a Tixtla. Líderes de los manifestantes denuncian que el Ejército y las policías retiraron ayer los retenes y patrullajes para permitir los ataques. En la región hay una disputa entre el Cártel del Sur y el grupo armado de El Teniente
Texto: Zacarías Cervantes
Fotos: José Luis de la Cruz
Zumpango del Río, 26 de septiembre 2017.- Una marcha de casi 2 mil pobladores de nueve comunidades del municipio de Eduardo Neri, que exigieron seguridad y la instalación de la Policía Comunitaria en Zumpango del Río, desencadenó distintos hechos de violencia con resultados de al menos cuatro muertos, dos heridos, un autobús de transporte público y una camioneta distribuidora de productos de una empresa privada incendiados.
Mientras tanto, el gobierno estatal por medio del vocero en materia de seguridad, Roberto Álvarez Heredia, informó que la Fiscalía General del Estado (FGE) investiga algunos de estos hechos, pero en el comunicado no confirmó el asesinato de cuatro personas.
La movilización y los posteriores episodios violentos ocurrieron en una zona que hasta antes del mediodía estaba sitiada por militares, policías federales y estatales, pero que después del mediodía, inexplicablemente, levantaron los retenes y suspendieron los patrullajes dejando la zona al libre albedrío de quienes se manifestaron violentamente.
Las acciones violentas se dieron en un contexto previo de acusaciones en las redes sociales entre los grupos criminales que se disputan la zona. Por un lado el Cártel del Sur y Los Ardillos, con el respaldo de los civiles armados de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG). Por el otro, los grupos armados que encabezan Juan Castillo Gómez.
El Teniente, aliado, según pobladores de la sierra, de Raybel Jacobo de Almonte, El Tequilero y con el respaldo de la autodenominada Policía Comunitaria de Tlacotepec, municipio de Heliodoro Castillo y de nueve pueblos de Eduardo Neri.
Estos nueve pueblos son los que se manifestaron ayer en Zumpango del Río, la cabecera municipal de Eduardo Neri, para exigir a las autoridades de los tres niveles de gobierno el cese de la violencia en sus pueblos y en la cabecera municipal. Después se desencadenó la violencia.
Los habitantes que se manifestaron son de Mezcala, Carrizalillo, Tenantiltlan, Amatitlán, Tepehuaje, San Miguel Vista Hermosa, Puente Sur Balsas, Mazapa y Plan de Libres.
Los pobladores se concentraron desde las 9 de la mañana en Mezcala, resguardados por civiles armados autodenominados “policías comunitarios”. Posteriormente partieron en una caravana de unos 80 vehículos, entre Urvan del servicio de transporte público, camiones de la minera Leagold (antes Gold Corp), y autos particulares rumbo a Zumpango. Encabezaban el convoy camionetas con civiles armados y encapuchados.
Cuando se organizaba la caravana a la salida de Mezcala pasó por la carretera federal un convoy de elementos de la Policía Militar de unos cinco camiones y vehículos en los que circulaban de Iguala a Chilpancingo aproximadamente 50 elementos, sin que se detuvieran a indagar lo que ocurría a pesar de que vieron la presencia de civiles armados.
La caravana de vehículos de los habitantes de los nueve pueblos y civiles armados avanzó atrás del convoy de la Policía Militar, después pasó sin incidentes por el retén de militares y policías federales y estatales que estaban en Casa Verde, en la desviación hacia Filo de Caballos y Tlacotepec. También cruzó sin problemas por el retén de militares y policías estatales ubicado en la entrada de Zumpango.
En la cabecera municipal se concentraron unas 2 mil personas que marcharon por varias calles gritando consignas como: “¡queremos la paz!” y “comunidades unidas, jamás serán vencidas”.
Los marchistas mostraban pancartas con leyendas como: “Paz y seguridad”, “queremos paz y bienestar para todas las comunidades” y “marcha por la paz”.
Adelante, caminaron resguardando a los marchistas que abarrotaron las calles, los civiles encapuchados y armados, otros se colocaron en las bocacalles de la carretera federal que pasa a la orilla del pueblo, y algunos más resguardaron desde las entradas y salidas la cabecera municipal.
En el transcurso de la marcha, el comisario municipal de Mezcala, Víctor Ventura, declaró que el motivo de la marcha era exigir seguridad para los pobladores de los nueve pueblos porque cuando vienen a la cabecera municipal son asaltados y robados, “y ya no queremos que pase eso”, dijo.
“Esta es una marcha por la paz y lo que queremos es la seguridad de todos los pueblos y principalmente en Zumpango en donde nuestra gente es asaltada y robada. “Zumpango es un pueblo de violencia, por eso los comisarios de la zona nos hemos puesto de acuerdo para venir a manifestarnos por la paz”, dijo.
Los marchistas caminaron por varias calles, pasaron por el antiguo Palacio Municipal que fue desalojado y cerró sus puertas. Después los marchistas se trasladaron al nuevo edificio ubicado en la colonia Los Arcos en la periferia de la población pero también estuvo cerrado. Los manifestantes se quedaron en plantón hasta que casi a la una y media llegó el alcalde perredista, Pablo Higuera Fuentes, quien entró al edificio para reunirse con una comisión de comisarios.
En la reunión que fue a puerta cerrada, los comisarios denunciaron los actos de violencia que sufren los habitantes de las comunidades cuando vienen a la cabecera municipal y pidieron que autorizara módulos de la Policía Comunitaria, porque señalaron que la Policía Municipal no es garantía y que, por el contrario, sospechan que es cómplice de los delincuentes”, dijo uno de los comisarios que entraron.
El incendio del autobús
Cando en la reunión todavía no había acuerdos, llegó la noticia a los comisarios, y los rumores a los marchistas que permanecían afuera del Palacio Municipal, de que civiles armados habían incendiado un autobús de pasajeros en el libramiento de cuota Chilpancingo-Tixtla.
El incendio ocurrió a unos 5 kilómetros de Tierras Prietas, rumbo a Tixtla.
Alejandro, el chofer del autobús, declaró que civiles armados a bordo de una camioneta le cerraron el paso, lo encañonaron, lo despojaron de sus pertenencias de valor e hicieron lo mismo con los 40 pasajeros que llevaba. En seguida rociaron de gasolina el autobús y le prendieron fuego.
El chofer informó que el autobús que conduce es de turismo pero que ayer transportaba pasajeros de Chilapa a Chilpancingo.
Minutos más tarde, una camioneta de la empresa distribuidora Marinela fue también incendiada en el antiguo libramiento a Tixtla, a la salida de Chilpancingo, en la entrada a la colona México.
Antes, los mismos hombres armados habían sometido al conductor de una camioneta de la empresa Transportes Rivera, a quien encañonaron y lo despojaron de sus pertenencias pero dejaron intacto el vehículo. Los civiles armados regresaron rumbo a Tierra Prietas.
Casi simultáneamente, hombres armados que se encontraban apostados a un costado de la carretera federal Chilpancingo-Acapulco, en la entrada de Zumpango, en el punto donde en la mañana estaba instalado el retén de militares y policías federales y estatales, dispararon a un convoy de camionetas de los marchistas que regresaban a Mezcala.
En se lugar resultaron heridos el ex comisariado ejidal de Carrizalillo, Roberto Guzmán Montiel y el ciudadano Oscar Marcial. El primero fue trasladado para su atención médica al hospital Raymundo Abarca Alarcón y el segundo a Mezcala.
A esa misma hora, cuando los comisarios todavía estaban reunidos con el presidente municipal Higuera Fuentes, cuatro campesinos de Carrizalillo fueron emboscados y asesinados en un paraje entre la comunidad de Amatitlán y Carrizalillo.
Uno de los muertos es el promotor de la autodenominada policía comunitaria y ganadera de Morelos pero avecindado en Carrizalillo, Clemente Flores. De los otros tres se desconocían sus nombres hasta entrada la noche.
El ex comisario municipal de Carrizalillo y promotor de la autodenominada policía comunitaria, Nelson Figueroa, denunció que todos estos hechos fueron parte de una emboscada que se tendió a los pobladores de las nueve localidades de Eduardo Neri que se manifestaron en contra de la violencia y para exigir seguridad en la zona.
También denunció que elementos del Ejército, Policía Federal y Estatal, evidenciaron su complicidad con los grupos armados que perpetraron los ataques indiscriminadamente, al abandonar la zona para que los agresores actuaran libremente.
Otro de los manifestantes, Osiel Nájera, denunció que desde que la caravana de los nueve pueblos entró a Zumpango del Río, los retenes que estaban en Casa Verde y en la entrada de la cabecera municipal se retiraron, asimismo, dijo que se suspendieron los patrullajes de militares y policías que se habían mantenido por la mañana, para dejar en libertad a los grupos del crimen organizado.
Denunció que desde Zumpango hasta Casa Verde, donde está el entronque para las comunidades de la sierra, se apostaron en las orillas de la carretera francotiradores que disparaban a diestra y siniestra a los automovilistas que les parecían sospechosos.
Uno de estos automovilistas fue el que conducía un vehículo blanco Ford Fusion, placas HAZ-727-A del Distrito Federal que recibió dos impactos de bala en las ventanillas del lado del conductor; en este vehículo resultó lesionada una persona pero no se conoció su identidad.
Mientras se cometieron los ataques en los distintos puntos, el temor y la angustia se apoderó de los marchistas que esperaban en Zumpango a que terminara la reunión y despavoridos en distintas direcciones comenzaron a correr en busca de los vehículos en los que llegaron para salir de la cabecera municipal rumbo a sus comunidades.
Al salir del pueblo se enteraron de la presencia de francotiradores en las orillas de la carretera e instalaron un bloqueo a la carretera federal, en el sitio donde por la mañana estaba el retén de militares, policías federales y estatales. Allí demandaron el resguardo de militares y policías federales y estatales para poder llegar a sus comunidades, ubicadas delante del punto conocido como Casa Verde, una zona controlada por el grupo criminal Cártel del Sur.
Por la noche, el vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia, informó que la FGE investiga el asalto al camión que, informó, transportaba jornaleros migrantes y el incendio de una camioneta “por sujetos desconocidos fuertemente armados”.
Agregó que la Policía del Estado implementó “inmediatamente” un operativo de búsqueda y localización de los responsables de los hechos y dar seguridad a la zona. Dijo que aproximadamente a las 13:30 horas de este martes, a través del 911, la Policía del Estado recibió el reporte de que en el libramiento a Tixtla, muy cerca de Matlalapa, estaba un autobús de pasajeros que se estaba incendiando y obstruía el paso de vehículos; de inmediato elementos de la Policía Estatal y bomberos acudieron al lugar, así como personal de la Fiscalía.
Agregó que en el lugar de los hechos, el conductor de la unidad que transportaba a 40 jornaleros agrícolas, quien se identificó como Alejandro “N”, explicó que minutos antes tres sujetos que viajaban a bordo de una camioneta blanca y que portaban armas de grueso calibre, lo habían interceptado y obligado a detener la marcha en ese lugar. Dijo que los sujetos armados obligaron a todos los pasajeros del autobús a bajar y después de robarles todas sus pertenencias, incendiaron el camión y enseguida huyeron. Álvarez Heredia añadió que una hora más tarde, en la carretera federal Chilpancingo-Chilapa, la Policía del Estado recibió otro reporte sobre el incendio de una camioneta con caja placas HE -24-282, propiedad de una empresa privada, que obstruía el tráfico en un carril a la altura del kilómetro 3 más 400, muy cerca de la colonia Lomas de Ocotepec. “En este caso, el chofer de esa unidad, quien fue encontrado cerca del sitio, explicó que sujetos armados lo habían interceptado y bajado de la unidad, y tras quitarle su cartera y celular, le habían prendido fuego a la camioneta repartidora”.
Álvarez Heredia también informó de un tercer hecho ocurrido en la carretera federal Chilpancingo-Iguala, a las 14:30 horas, cuando elementos de la Policía del Estado que se encuentran en un puesto de control ubicado cerca de Zumpango del Río, fueron informados de que en el kilómetro 27 más 500 de esa vía un hombre que viajaba en un auto había sido atacado a balazos por desconocidos.
El portavoz explicó que los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública acudieron de inmediato al lugar y se encontraron un automóvil Ford, tipo Fusión, blanco, con impactos de bala en el parabrisas, ventanas y partes de la carrocería, y a un costado estaba tirado con varias heridas el conductor del mismo, quien fue trasladado al hospital general de Chilpancingo por personal de Protección Civil. El vocero añadió que la víctima, quien se identificó como Roberto “N”, declaró a los uniformados que lo auxiliaron que iba conduciendo su auto y de pronto sujetos desconocidos comenzaron a dispararle sin motivo alguno desde los cerros.
El funcionario no confirmó, el asesinato de cuatro pobladores de Carrizalillo, ni los dos heridos en el ataque a la salida de Zumpango.
Lea toda la información en nuestra edición impresa de este miércoles:
http://suracapulco.mx/?newsDay=1/
