2 mayo,2022 8:50 am

Desfilan sindicatos después de dos años y reclaman falta de diálogo a la 4T

 

Ciudad de México, 2 de mayo de 2022. Después de dos años, los trabajadores sindicalizados volvieron a marchar por la Ciudad de México en el Día del Trabajo, en el que reclamaron al presidente Andrés Manuel López Obrador la falta de diálogo.

Sin embargo, la unidad no fue la característica de la movilización de ayer. Diversos contingentes salieron de puntos distintos. Unos del Monumento a la Revolución, otros del Hemiciclo a Juárez, o de la esquina de Eje Central y 5 de Mayo.

Con batucadas, banderas de sus respectivos sindicatos, lonas y gritando consignas, unas 30 mil personas –según datos del Gobierno de la Ciudad de México–, se aproximaron a la plaza de la Constitución por Madero, 5 de Mayo y la calle de Tacuba.

Al llegar encontraron medio Zócalo ocupado por la instalación de la réplica de la Capilla Sixtina, lo que fue visto como una falta de respeto para la clase trabajadora.

Ahí, con media plaza atiborrada, Francisco Hernández Juárez, quien desde 1976 es secretario general del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana, celebró que en 2018 la gente votara por un cambió, pero inmediatamente cuestionó dónde está el cambio prometido.

“El Gobierno ha decidido que ese cambio tiene que impulsarse sólo por las acciones que el propio Gobierno desarrolla, no parece entender que sin la participación de la sociedad, específicamente de los sindicatos, ese cambió se va a ver frustrado, porque los grandes intereses que van en contra de ello están actuando y se están posicionando”, lanzó.

Apenas terminó de hablar el líder telefonista, la plancha del Zócalo prácticamente se vació, pues la mayoría de los asistentes era de ese sindicato.

Todo el tiempo había contingentes que llegaban y otros que se retiraban. No lucieron, como en otros años, los trabajadores petroleros, de la UNAM o de la Administración Pública. Y los grupos de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), que marcharon desde el Monumento a la Revolución, tampoco estuvieron nutridos.

Con el Zócalo casi vacío, el secretario general de la Sección 9 de la CNTE, Pedro Hernández Morales, consideró que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador mantiene el mismo sistema de explotación de otros años.

“En lo fundamental sigue existiendo como continuidad de las estructuras de dominación y explotación, de manera servil entrega el País al domino imperialista, principalmente estadounidense, ofreciendo a los migrantes mexicanos y centroamericanos como mano de obra barata”, dijo.

“La militarización del país ya es una preocupación de los organismos internacionales, como la ONU, que critica el hecho de que las Fuerzas Armadas asuman tareas de seguridad pública (…) también se utiliza Guardia Nacional para reprimir las luchas sociales de la CNTE, de los normalistas, del Movimiento de Unificación y Lucha Triqui Independiente”.

Otros representantes sindicales reconocieron que la pandemia de Covid-19 les afectó laboralmente y rechazaron que las pensiones se calculen con base en la Unidad de Medida y Actualización (UMA).

Hugo Bautista, quien en el mitin se presentó como vocero de la Nueva Central de Trabajadores, afirmó que a tres años de la reforma laboral ellos han cumplido en la legitimación de los contratos y en permitir el voto libre y secreto en los sindicatos.

“Por eso pedimos, en esta plataforma, que también haya los mismo para aquellos que imparten la justicia laboral, que se pronta y expedita, si hemos cumplido, que ellos cumplan también”, dijo.

Dejan al líder del sindicato petrolero Ricardo Aldana fuera del presidium

Fuera del presidium, encerrado en el corral de invitados al festejo del Día del Trabajo, olvidado a la hora de las presentaciones, atendido con un saludo casi accidental del presidente Andrés Manuel López, quedó el dirigente del sindicato petrolero, Ricardo Aldana, electo apenas hace tres meses.

Entró el mandatario estrechando manos de obreros de la Refinería Olmeca de Dos Bocas y lo encontró colgado de brazos en la reja de alambre.

Estrechó antes la mano del dirigente del SME, Martín Esparza, le palmeo el brazo, platicaron. Al lado lo encontró a él, hasta adelante, pero colgado de brazos de la reja de alambre, sin cubrebocas como para que lo reconociera. Lo saludó rápido y lo apuntó con el índice.

Entre los líderes sindicales presentes, la secretaria del Trabajo, Luisa Maria Alcalde, no mencionó al del sindicato de Pemex.

“Porque es el Día del Trabajo, no el día del petrolero”, se excuso Aldana sobre el trato, ya a la salida.

¿Ya hizo una limpia en el sindicato?, le preguntaron.

“No. con una rama o con qué?”, respondió el ex tesorero de Carlos Romero Deschamps, ya con cubrebocas. Que si hay corrupción en Pemex, en el sindicato petrolero… “Miren, en todos lados hay sus granitos negros, estamos viendo que se corrija todo”. Pero sí, habrá una limpia. Miren, la limpia la piden los trabajadores, los que mandan, los dirigentes solamente obedecemos”.

Texto: Agencia Reforma