Chilpancingo, Guerrero, a 17 de junio de 2024.- La Policía Comunitaria de Colombia de Guadalupe, municipio de Malinaltepec, rescató a Marisol, una joven de Atlixtac sometida a un proceso de reeeducación, violada por dos comandantes regionales de la Casa de Justicia de Espino Blanco de la Coordinadora Regional de Autoridades (CRAC), quienes la sacaron de la reclusión para ir a tomar alcohol con otros coordinadores.
Según el acta de hechos firmada por las autoridades comunitarias de Colombia de Guadalupe de fecha 26 de mayo, la comunidad aún se va a reunir en asamblea para determinar la sanción a los agresores, y analizar la condición de la víctima.
En el relato se indica que el día anterior, autoridades comunitarias fueron a una diligencia a la Casa de Espino Blanco, anexo de Colombia de Guadalupe, y cuando preguntaron por los comandantes regionales, les dijeron que se habían ido. Sólo había una persona cuidando a los detenidos.
De regreso a la localidad vieron la patrulla de los comandantes regionales estacionada frente a una tienda, cerca del Crucero de Iliatenco, donde también se encontraban los comandantes de la Policía Comunitaria de Colombia de Guadalupe que habían acudido a un llamado de auxilio a una mujer que había, “rodado unos 50 metros de distancia”.
Adentro, en la tienda, estaban los comandantes regionales de la CRAC en completo estado de ebriedad, portando armas de alto calibre.
En el escrito señalan que la joven se encontraba en reeducación por “por falta de disciplina a sus padres”, a quien los comandantes regionales obligaron a ir con ellos y otros coordinadores a tomar cervezas.
Cuando fue al baño la interceptaron dos comandantes por separado, Marino y Damián, y la violaron en una habitación.
Después del ataque quiso salir corriendo pero pisó mal una escalera y se cayó de una distancia considerable, posiblemente por una barranca. Ahí muchas personas acudieron a ayudarla.
Extraoficialmente se menciona que es menor de edad. Los pobladores denunciaron el abuso de autoridad.
“Manifiesta que en su desesperación de querer retirarse se paró a la orilla del terreno cercano a la casa, cuando de pronto se acercó el comandante Damián sin saber si su intención era abrazarla o empujarla, fue entonces que rodó, cuando reaccionó ya estaba el comandante Timoteo ayudándola, posteriormente se incorporó el comandante David que también quería abrazarla, en el entendido de que ambos estaban tomando, comenzaron a discutir”, detalla.
También dijo que le pidieron que no dijera nada de lo ocurrido. Luego llegaron los comunitarios de Colombia de Guadalupe.
El domingo 25 de mayo se ejecutó la orden de aprehensión de los presuntos violadores, Marino y Damián en la comandancia municipal de Colombia de Guadalupe.
En los acuerdos quedó pendiente la fecha para realizar la asamblea regional para analizar la situación de la joven, y el castigo a los agresores.
Texto: Lourdes Chávez / Foto: El Sur / Archivo
